En medio del dolor y pocos familiares fueron sepultados los restos de la pequeña Roxana Mejía Montúfar, de dos años, quien fue asesinada a machetazos en Copán, occidente hondureño.
La pequeña fue enterrada en el cementerio Los Laureles de San Pedro Sula por una de sus tías quien no pudo reprimir su dolor por el crimen.
El cuerpo sin vida de la niña fue retirado este miércoles por sus familiares en Medicina Forense de San Pedro Sula.
En el hospital Mario Rivas sigue interna la madre de la niña debido a la situación de pobreza de la familia.
El brutal asesinato de la pequeña Roxana conmocionó a Copán, en hecho sucedido en la aldea El Rabinal, municipio de Santa Rita.
 Roxana Mejía Montúfar será enterrada en el cementerio Los Laureles de SPS.
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El cruel asesinato de la niña ocurrió dentro de la vivienda de la familia, donde los criminales aprovecharon la oscuridad de la madrugada e ingresaron a la humilde casa y atacaron a la madre, quien por tratar de proteger a la pequeñita también resultó herida; pero la intensidad de las heridas provocó la muerte casi inmediata de la menor.
Al momento del ataque, el esposo y padre de la niña pudo escapar, por lo que resultó ileso. A las pocas horas del hecho, equipos policiales lograron capturar en una montaña a los cuatro sospechosos del asesinato, a quienes identificaron como Elías Contreras Santos, alias la Bruja (31), Olvin Mauricio Contretas Hércules (31), Héctor Fausto Contreras Urbina (61), y Osman Alexis Contreras Hércules (33), los que fueron remitidos a la Fiscalía de Copán para el proceso de investigación.
