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En explosión en cohetería se queman padre y sus tres hijos

  • 05 agosto 2015 /

Un hombre y sus tres hijos de 10, 8 y 4 años resultaron con quemaduras graves en Santa Bárbara.

Santa Bárbara, Honduras

El niño José Antonio Pineda Fernández (10), es la víctima mortal de una explosión dentro de una cohetería clandestina que tenía su padre Ubaldo Pineda (40) dentro de su propia casa, junto al menor fallecido resultaron heridos sus dos hermanitos Selvin Pineda Fernández (8) y Wilson Pineda (3) además de su padre Ubaldo Pineda, que fue trasladado al hospital Escuela Universitario.

La mañana se tornaba calurosa con la salida del sol, pero a las 6:40 am todo se convirtió en tragedia, los vecinos escucharon un tremendo estruendo en el barrio La Magdalena, en esta cabecera departamental, las miradas fueron dirigidas a la casa de Ubaldo Pineda, ya que era el único que tenía una cohetería clandestina, donde elaboraba junto a sus hijos bombas de mano que las comercializaba en las feria de los municipios pateplumas.

“Cuando escuché la detonación se me vino a la mente lo peor, salí a la calle, vi el humo por todas partes, láminas que estaban en los árboles, era un desastre completo”, así lo narra Anael Reyes, quien fue el primero en auxiliar a las cuatro víctimas. “Yo miré que los niños gritaban de dolor, Ubaldo pedía auxilio, yo saqué mi carro y los trasladé al hospital, donde los atendieron de emergencia, fueron momentos de pánico porque solo queríamos que se les salvara la vida”, dijo Reyes.

Uvaldo Pineda y sus tres hijos fueron llevados de emergencia al hospital de Santa Bárbara.

Los bomberos llevaron a los afectados al hospital de Santa Bárbara.

Ubaldo y el pequeño José Pineda fueron trasladados al Hospital Escuela Universitario, de la capital; Wilson y Selvin al Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula, pero al llegar a Siguatepeque el pequeño José falleció en la ambulancia que los trasportaba.

El jefe del Cuerpo de Bomberos, Subteniente Juan Cantarero, informó que la investigación va encaminada al recalentamiento de las líneas del sistema eléctrico que pudieron provocar un corto circuito, esto hizo estallar la pólvora que estaba dentro de la vivienda.

“No pueden existir coheterías clandestinas en casas de habitación porque el riesgo es enorme por las altas temperaturas que estamos viviendo hoy en día”, ratificó Juan Cantarero.

El pequeño José Antonio Pineda estaba en la escuela doctor Muñoz Ortega, del barrio La Magdalena, y cursaba el sexto grado; Selvin de 8 años, está en segundo grado. La población y vecinos del barrio la Magdalena se unieron para poder brindar un apoyo económico a la familia.

La casa de Uvaldo Pineda quedó totalmente destruida.

En la vivienda dondefuncionba una cohetería clandestina quedó destruida.

Uvaldo Pineda (32) fue llevado al hospital de Santa Bárbara.