Tegucigalpa, Honduras.
A la Penitenciaría Nacional de Támara fue enviado uno de los presuntos implicados en la masacre ocurrida el pasado 11 de mayo en la colonia El Carrizal.
En horas de la noche del miércoles, un juez de turno celebró la audiencia de declaración de imputado en contra de Francisco Javier Chavarría, alias el Gordo, presunto integrante de la mara Salvatrucha y acusado de asesinato en perjuicio de cinco personas e intento de homicidio en contra de un sobreviviente. En la masacre sucedida aquella noche murieron Arnoldo Carrasco, Carlos Gutiérrez, Carlos Merino Gutiérrez, Carlos Merino Núñez y Michael Godoy.
Javier Álvarez, alias el Travieso, el otro implicado en la masacre, permanece interno en el Hospital Escuela luego que resultara herido al enfrentarse con los agentes de la DNIC que participaron en el operativo para capturarlos.
Ambos presuntos mareros tenían orden de captura emitida por los Juzgados de lo Penal, pero por ser miembros de una banda considerada del crimen organizado el caso fue trasladado a los Juzgados con Jurisdicción Nacional.
En relación con la masacre, las autoridades tomaron como prueba anticipada la declaración de un testigo protegido, quien permanece bajo protección, ya que sería clave para el momento en que el caso sea elevado a juicio oral.
La misma noche en que se tomó la declaración del testigo, ya teniendo conocimiento de varios nombres de sospechosos, el Ministerio Público pidió al juez que emitiera órdenes de captura en contra de los supuestos implicados.
Según la Policía, el Gordo y el Travieso fueron los cabecillas de la acción criminal para cometer el asesinato de las personas que se encontraban en el negocio de venta de productos lácteos en El Carrizal.
Las autoridades informaron que supuestamente la organización criminal tenía un mes de estar exigiendo a los comerciantes el pago de extorsión, pero ellos se negaban debido a que ya pagaban a otras dos organizaciones delictivas.
A la Penitenciaría Nacional de Támara fue enviado uno de los presuntos implicados en la masacre ocurrida el pasado 11 de mayo en la colonia El Carrizal.
En horas de la noche del miércoles, un juez de turno celebró la audiencia de declaración de imputado en contra de Francisco Javier Chavarría, alias el Gordo, presunto integrante de la mara Salvatrucha y acusado de asesinato en perjuicio de cinco personas e intento de homicidio en contra de un sobreviviente. En la masacre sucedida aquella noche murieron Arnoldo Carrasco, Carlos Gutiérrez, Carlos Merino Gutiérrez, Carlos Merino Núñez y Michael Godoy.
Javier Álvarez, alias el Travieso, el otro implicado en la masacre, permanece interno en el Hospital Escuela luego que resultara herido al enfrentarse con los agentes de la DNIC que participaron en el operativo para capturarlos.
Ambos presuntos mareros tenían orden de captura emitida por los Juzgados de lo Penal, pero por ser miembros de una banda considerada del crimen organizado el caso fue trasladado a los Juzgados con Jurisdicción Nacional.
En relación con la masacre, las autoridades tomaron como prueba anticipada la declaración de un testigo protegido, quien permanece bajo protección, ya que sería clave para el momento en que el caso sea elevado a juicio oral.
La misma noche en que se tomó la declaración del testigo, ya teniendo conocimiento de varios nombres de sospechosos, el Ministerio Público pidió al juez que emitiera órdenes de captura en contra de los supuestos implicados.
Según la Policía, el Gordo y el Travieso fueron los cabecillas de la acción criminal para cometer el asesinato de las personas que se encontraban en el negocio de venta de productos lácteos en El Carrizal.
Las autoridades informaron que supuestamente la organización criminal tenía un mes de estar exigiendo a los comerciantes el pago de extorsión, pero ellos se negaban debido a que ya pagaban a otras dos organizaciones delictivas.
