San Pedro Sula, Honduras.
Lo que empezó como un rato ameno con bromas entre un guardia de seguridad y un vendedor de recargas para teléfonos celulares terminó trágicamente con la muerte de uno de ellos.
La víctima es Cirilo Gutiérrez, quien laboraba vendiendo a domicilio recargas y tarjetas de una empresa de telefonía celular.
Las autoridades policiales informaron que a eso de las 7:15 am de ayer, Gutiérrez y el guardia de seguridad José Adalid Flores antes de irse a sus labores se fueron a desayunar a una glorieta que está frente a la empresa donde laboraba el vendedor situada en el colonia Altiplano.
El guardia era parte del cuerpo de celadores que trabajan para una empresa que le da el servicio de seguridad a los vendedores que laboran para la empresa de telefonía.
Mientras estaban en la glorieta el vendedor le hizo una broma que molestó a Flores y este sacó su pistola y le disparó en varias ocasiones.
El celador después de dispararle a Gutiérrez le entregó la pistola a un compañero y huyó. El vendedor fue llevado con vida a una clínica en el barrio Las Palmas, donde falleció minutos después de ser ingresado.
El cadáver de Cirilo Gutiérrez fue reconocido por las autoridades forenses, fiscales y de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) a las 11:30 am.
