Tegucigalpa, Honduras
Cuatro personas murieron y tres quedaron heridas tras un accidente vehicular en la carretera que de Tegucigalpa conduce al oriente del país.
El percance ocurrió en el kilómetro 21 a inmediaciones de la aldea Joya Grande, adonde un camión cargado de sal que viajaba procedente de la zona sur volcó en la orilla de la calzada.
En el acto perdieron la vida cuatro ocupantes del camión: Luis Agustín Villalobos Medina, Miguel Ángel Ortez Murillo y los hermanos Hasler Antonio y Carlos Roberto Rodríguez Cruz, de 18 y 14 años, todos originarios de San Lorenzo, Valle. Resultaron heridos el motorista Ramón Vásquez Gallo, su hijo del mismo nombre y Pablo Roberto Ruiz, quien era el padre de los dos hermanos fallecidos.
Según testigos, el percance vial sucedió alrededor de las doce de la noche cuando el camión con varios quintales de sal circulaba en dirección a El Zamorano.
Al bajar por una pendiente, el camión sufrió desperfectos mecánicos, por lo que el conductor perdió el control del volante y se dio vuelta, por lo que resultó con la cabina y la carrocería destruidas.
La carga que transportaba el automotor quedó esparcida en la orilla de la calzada y sobre la misma los cuerpos de las cuatro víctimas mortales.
El jefe de la Dirección Nacional de Tránsito (DNT), comisionado Quintín Juárez, informó que el camión salió de San Lorenzo alrededor de las 9:00 pm del martes y que debido a la sobrecarga se produjo un recalentamiento de frenos, lo que provocó que se diera vuelta.
Agregó que la carga cayó sobre la cabina, por lo que algunos de los ocupantes quedaron soterrados.
Las autoridades competentes reconocieron los cadáveres, los que fueron ingresados a la morgue capitalina ayer a las 4:10 am.
En un ambiente de dolor y consternación, Glenda Xiomara Cruz, con otros miembros de su familia, reclamó los cuerpos de sus hijos Hasler Antonio y Carlos Roberto.
La acongojada madre relató que el encargado de la venta de la sal era su excompañero de hogar Pablo Roberto Ruiz, quien contrató el camión para que transportara la carga por cinco mil lempiras.
