El Progreso, Yoro
Dos hombres fueron sacados de su vivienda y los ultimaron a balazos frente a sus familiares ayer en la madrugada en la aldea El Bálsamo, El Progreso.
Las víctimas eran cuñados y fueron identificadas como Óscar Fabricio Garmendia (de 27 años), quien laboraba como guardia de seguridad de una tienda en San Pedro Sula y Darwin Josué Rodríguez Almendárez (de 25), que se dedicaba a la venta de accesorios para celulares.
Garmedia estaba casado con una hermana de Rodríguez Almendárez.
El doble crimen ocurrió a eso de las 4:00 am cuando las ahora víctimas se encontraban durmiendo. Familiares relataron a LA PRENSA que cinco hombres vestidos con uniformes con insignias de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y con los rostros cubiertos con gorros pasamontañas y fusiles llegaron en un vehículo doble cabina color gris del cual se bajaron cuatro y con una almágana rompieron el candado del portón.
Mientras rompían el candado los hombre dijeron que se trataba de un operativo y que “los buscaban para investigación”. Al ingresar al inmueble abrieron la puerta de uno de los cuartos a patadas y sacaron a Darwin Josué, Óscar Fabricio y otro joven que se salvó de milagro ya que huyó; a los tres los amarraron de las manos con abrazaderas plásticas y los tiraron al suelo.
Familiares de las víctimas relataron que los homicidas, golpearon brutalmente a Darwin Josué debido a que se resistía a ser subido al carro y le dispararon en el patio de la vivienda, quedando muerto en lugar.
Óscar Fabricio fue llevado a la paila del automóvil y sus familiares le gritaron que se bajara y cuando lo hizo, los delincuentes lo acribillaron en la calle.
“Pedimos que se haga justicia. Ellos eran personas trabajadoras, no se metían con nadie ni tenían problemas. No habían recibido amenazas”, dijo una pariente de las víctimas.
