Lo que comenzó como una tarde de fervor patrio, culminó con una amarga pelea que pudo costarle la vida a Sandra Beatríz Hernández (28 años), una hondureña residente en Comayagua.
Una pariente de la fémina que cuida de ella en el Hospital Escuela Universitario (HEU) relató que su delicada condición es consecuencia de la salvaje golpiza propinada por la pareja sentimental de la mujer.
Aunque el pronóstico inicial hacía temer por su vida, tal parece que lo peor ya ha pasado. Aun así, el cuadro luce desolador.
Una gran herida recorre el frente del rostro de Sandra, desde la base de la barbilla hasta alcanzar su nariz y que se mantiene cerrada gracias al grueso hilo quirúrgico que mantiene la piel en su lugar.
La mujer casi pierde sus brazos, pero los médicos lograron salvárselos.
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El caso de Sandra ilustra muy bien el dicho de que “del amor al odio solo hay un paso”, sobre todo cuando hay alcohol de por medio.
Relación de los hechos
Aunque Sandra no puede hablar debido a su condición, la pariente antes mencionada relató la historia que terminó con la protagonista tendida dolorosamente en una cama de hospital.
Al parecer todo comenzó la tarde el 14 de septiembre, cuando Sandra quiso salir a ver los desfiles patrios por el Día de la Independencia en la ciudad de Comayagua.
Su pareja la encontró en la calle y le pidió que se fuera con él luego de comprar unas cervezas. Tras llegar a una casa en la que estuvieron solos, consumieron las bebidas y el hombre la envió a comprar más cerveza a un expendio cercano.
Los médicos suturaron una gran herida de machete en el rostro.
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El relato prosigue detallando que el hombre la tomó del brazo y le dio un puñetazo en el ojo; acto seguido sacó un cuchillo y la apuñaló. Tratando de defenderse Sandrá busco con la mirada y vio un machete que había cerca y tomándolo, le dio un golpe a su atacante.
“Por este machetazo te van a agarrar y te van a hallar donde sea y la Policía te va a meter preso”, refiere la pariente que Sandra le dijo a su pareja.
El hombre le quitó el machete y comenzó a golpearla, pero ella trató de protegerse con las manos, que terminaron fracturadas a causa de los golpes. La golpiza fue tan salvaje que Sandra perdió el conocimiento y para cuando volvió en sí, ya se encontraba en el hospital, termina el relato de la pariente.
Los familiares de Sandra interpusieron una denuncia ante la Fiscalía del Ministerio Público y se hallan a la espera de que vengan a hacerle una evaluación para proceder con la investigación del caso.
Miguel Osorio, portavoz del HEU, informó que la mujer fue ingresada la noche del 14 al 15 de septiembre y que fue gracias a la intervención quirúrgica que se le practicó que fue posible salvarle los brazos.
Ahora Sandra requerirá de terapia física y de rehabilitación para recuperarse.