Tegucigalpa, Honduras.
La violencia contra la mujer no da tregua. En menos de diez días han sido nueve las féminas que han perdido la vida de manera violenta en el país.
Siete de las muertes se registraron en Francisco Morazán, una en Copán y la última en una aldea de Belén Gualcho, en Lempira.
Ayer por la mañana, la dueña de una pulpería fue ultimada en la colonia Nueva Suyapa, de la capital.
Con la excusa de comprar un jugo llegó a la pulpería el asesino de Brenda Margarita Raudales Rodríguez (de 34 años). El sicario le pidió a la dama que le vendiera un jugo, la mujer, como toda vendedora, se dio la vuelta, fue al refrigerador y sacó el producto que él le había solicitado.
Al llegar a la puerta de la pulpería, que también era su casa, el hombre la esperaba con la pistola solo para halar el gatillo frente a la cara de ella que, aún en pie, logró llegar hasta la cocina de la casa, pero el tiro fue fulminante y le causó la muerte casi de inmediato.
Frente a su hija
La víctima es madre de dos niñas y al parecer estaba en compañía de su hija menor de cuatro años de edad. Un hermano de la fallecida manifestó que “no teníamos problemas con nadie, ni con los vecinos, no sabemos por qué pasó esto”, afirmó.
Al consultarle si la muerte de su hermana ocurrió por problemas derivados del cobro de extorsión, solo argumentó que “no le sabría decir”. Brenda Raudales era propietaria de dos pulperías en la misma colonia Nueva Suyapa, una era atendida por ella y la otra por una empleada. Se conoció que su compañero de hogar había viajado hace algunos años a Estados Unidos y ella se había quedado al cuidado de sus dos hijas.
Lempira
Ayer un hecho criminal contra una mujer conmocionó a la aldea El Rodeo, en Belén, Lempira.
Enterrada en un solar baldío encontraron los restos de Blanca Olenia Carranza (de 22), quien, de acuerdo con las denuncias de sus parientes, habría sido ultimada por su pareja sentimental.
Carranza era una ama de casa, hondureña, originaria y residente en la aldea El Rodeo.
Autoridades policiales reportaron que vecinos denunciaron que en un solar de Reynaldo Portillo había una tumba clandestina.
Atendiendo la denuncia, autoridades exhumaron el cuerpo de Carranza.
En relación con el dictamen preliminar, el cuerpo presentaba al menos dos heridas producidas por arma blanca, aunque la causa de muerte no se determinó, por lo que el cadáver lo trasladaron a la morgue de San Pedro Sula.
Parientes de Carranza denunciaron que la mujer sufría violencia doméstica de parte de su marido, quien se encuentra desaparecido.
La violencia contra la mujer no da tregua. En menos de diez días han sido nueve las féminas que han perdido la vida de manera violenta en el país.
Siete de las muertes se registraron en Francisco Morazán, una en Copán y la última en una aldea de Belén Gualcho, en Lempira.
Ayer por la mañana, la dueña de una pulpería fue ultimada en la colonia Nueva Suyapa, de la capital.
Con la excusa de comprar un jugo llegó a la pulpería el asesino de Brenda Margarita Raudales Rodríguez (de 34 años). El sicario le pidió a la dama que le vendiera un jugo, la mujer, como toda vendedora, se dio la vuelta, fue al refrigerador y sacó el producto que él le había solicitado.
Al llegar a la puerta de la pulpería, que también era su casa, el hombre la esperaba con la pistola solo para halar el gatillo frente a la cara de ella que, aún en pie, logró llegar hasta la cocina de la casa, pero el tiro fue fulminante y le causó la muerte casi de inmediato.
Frente a su hija
La víctima es madre de dos niñas y al parecer estaba en compañía de su hija menor de cuatro años de edad. Un hermano de la fallecida manifestó que “no teníamos problemas con nadie, ni con los vecinos, no sabemos por qué pasó esto”, afirmó.
Al consultarle si la muerte de su hermana ocurrió por problemas derivados del cobro de extorsión, solo argumentó que “no le sabría decir”. Brenda Raudales era propietaria de dos pulperías en la misma colonia Nueva Suyapa, una era atendida por ella y la otra por una empleada. Se conoció que su compañero de hogar había viajado hace algunos años a Estados Unidos y ella se había quedado al cuidado de sus dos hijas.
Lempira
Ayer un hecho criminal contra una mujer conmocionó a la aldea El Rodeo, en Belén, Lempira.
Enterrada en un solar baldío encontraron los restos de Blanca Olenia Carranza (de 22), quien, de acuerdo con las denuncias de sus parientes, habría sido ultimada por su pareja sentimental.
Carranza era una ama de casa, hondureña, originaria y residente en la aldea El Rodeo.
Autoridades policiales reportaron que vecinos denunciaron que en un solar de Reynaldo Portillo había una tumba clandestina.
Atendiendo la denuncia, autoridades exhumaron el cuerpo de Carranza.
En relación con el dictamen preliminar, el cuerpo presentaba al menos dos heridas producidas por arma blanca, aunque la causa de muerte no se determinó, por lo que el cadáver lo trasladaron a la morgue de San Pedro Sula.
Parientes de Carranza denunciaron que la mujer sufría violencia doméstica de parte de su marido, quien se encuentra desaparecido.
