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Arrestan a madre acusada de asesinar a su niña de dos meses

  • 22 noviembre 2017 /

La mujer fue apresada anoche en Lepaera, Lempira, adonde había huido tras supuestamente cometer el parricidio.

San Pedro Sula, Honduras.

En la aldea La Libertad, del municipio de Lepaera, Lempira, fue capturada anoche Sandra Suyapa Cantarero Gutiérrez (de 21 años de edad), acusada del asesinato de su hija recién nacida de tan solo dos meses de edad, en la aldea San Pedrito, del municipio de Atima, Santa Bárbara, el lunes anterior.

La Policía informó que Sandra Suyapa es investigada en la oficina de la Direccion Policial de Investigaciones (DPI), de Gracias, Lempira, para posteriormente ser remitida a la ciudad de Santa Bárbara.

“Qué Dios se encargue”

“Yo no puedo perdonarla y que Dios se encargue de darle su castigo”, manifestó ayer el caficultor Ángel Humberto Santos al referirse al crimen de su hija de dos meses de nacida, quien, según él, fue ultimada a balazos por su propia madre en la aldea San Pedrito, Atima, Santa Bárbara.

Foto: La Prensa

El cuerpecito de la bebé tenía dos heridas de arma de fuego en el abdomen.
El crimen de la pequeña Maryuri Santos Cantarero ocurrió la tarde del lunes luego de que su madre Sandra Suyapa Cantarero le infiriera dos balazos mientras la bebé dormía en el cuarto de la pareja, de acuerdo con lo declarado por Santos.

El caficultor Ángel Humberto Santos (61) dijo que hizo vida marital un año con la joven Sandra Suyapa (22) y “los días que vivimos juntos viví tan feliz y creí tanto en el hogar que confíe todo en ella. Sandra fue humilde, atenta, cariñosa con su hija y conmigo, y no tengo queja de ella y no me explico por qué mató a la niña”.

Santos recordó que el lunes en la mañana se fue en su carro para Atima a comprar concentrado para los cerdos, cosas para el negocio y una leche para la niña que le encargó su mujer, y a las 3:30 pm regresó a su casa en la aldea San Pedrito. Dijo que al llegar se dirigió al cuarto donde estaba su esposa con la niña y tras saludarla volvió a salir a descargar las cosas del carro. Pocos minutos después escuchó dos disparos en el cuarto y “yo en mi mente dije: ‘aquella está disparando la pistola al aire’, y corrí. Al entrar ya miré a la niña muerta”.

Foto: La Prensa

La cama donde la mataron.
“Yo le dije a Sandra: ‘qué hiciste’, y la insulté, y en eso entró mi sobrino y me preguntó: ‘qué fue, tío’, y yo le dije: ‘se hartó mi niña’”, expresó Santos. Indicó que Sandra solo se limitó a decirle: “La maté”. Relató que su mujer no manifestó por qué cometió el crimen”. Explicó que en su afán de salvar a la niña él le dio respiración boca a boca, pero ya “estaba muerta y empecé a llamar a mi hijo mayor, y llamé a la Policía de Atima, que tengo su número, pero nadie me contestó, y yo andaba loco en la casa llamando de aquí para allá”.

Explicó que en esos momentos que él estaba desesperado, la mamá de la niña huyó con la pistola y él no pudo evitar que se fuera “porque yo estaba más pensando en cómo salvar a mi criatura”. “Estuvimos juntos un año y yo no tengo queja de ella y ni idea de lo que pasó, puesto que su comportamiento fue excelente, muy dedicada a su niña y amorosa con ella”, comentóSantos, quien expresó que nunca discutieron como pareja porque se llevaban bien.

El caficultor no pide nada contra su mujer, sino que “Dios se encargue de darle su castigo”. Santos aseguró que no perdona a Sandra porque le mató a su hija, que era lo más preciado que tenía. “Bien pude matarla a ella cuando miré a mi hija muerta.Yo le pedí a Dios que me diera fortaleza, y me la dio, para no matar a mi mujer”. Indicó que tiene mala suerte porque hace un año con dos meses se suicidó una joven de 16 años que hacía vida marital con él.

Foto: La Prensa

Ángel Santos.