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Cae sospechoso de matar a madre e hijo en Olanchito

  • 21 mayo 2017 /

Vicente José Munguía Rivera está acusado de asesinar a Sebastiana Bonilla y el hijo de ella, Darwin Colindres

    Olanchito, Yoro.

    La Policía capturó a un individuo sospechoso de asesinar a una madre y su hijo en el interior del hospital público de Olanchito hace más de una semana.

    El sospechoso fue identificado por las autoridades policiales como Vicente José Munguía Rivera (de 20 años), soltero, jornalero, originario y residente en la aldea Calpules, jurisdicción del Olanchito, Yoro.

    A esta persona se le acusa de asesinar a Sebastiana Bonilla (de 51) y su hijo Darwin Roberto Colindres Bonilla (de 18), hecho sucedido el viernes 12 de mayo en horas de la noche en la sala de ciudados intensivos del hospital Aníbal Murillo Escobar de esta ciudad.

    El sospechoso fue capturado en la aldea Nombre de Jesús, jurisdicción de este municipio, mediante una orden de captura emitida por el Juzgado de Letras Seccional de Olanchito, por asesinato y portación ilegal de arma de fuego comercial, relacionado con el doble homicidio cometido en el referido centro asistencial.

    Durante su detención se le decomisó una pistola marca Llama, calibre 45 milímetros y su cargador con 10 proyectiles, la cual se supone habría sido utilizada en el hecho, una motocicleta roja, marca Bajaj, modelo Discovery, año 2015 y con placa MAD 8563, según el reporte proporcionado por la Policía de Olanchito.

    Doble crimen.

    Según las investigaciones policiales, los hechos sucedieron cuando la señora se encontraba recuperando en esta sala a raíz de un balazo que recibió ese mismo día durante un asalto, ahí se encontraba su hijo que estaba al cuidado de ella.

    Las víctimas fueron asesinadas por dos individuos que ingresaron en el nosocomio a las 11:30 pm, luego de burlar la seguridad del hospital. Los cuerpos de madre e hijo quedaron sobre las camas. El personal de emergencia intentó salvarles la vida, pero presentaban graves heridas de arma de fuego.

    Testigos contaron que el tiroteo ocurrió muy rápido, pero que vivieron minutos de terror.