San Pedro Sula, Honduras.
Que les permitan trabajar hasta la media noche solicitan los dueños de bares, discotecas y de negocios de venta de alimentos de San Pedro Sula, quienes durante los dos últimos fines de semana han sido obligados a cerrar operaciones a las 10:00 pm en apego al toque de queda vigente en el país a causa de la pandemia por el covid-19.
De acuerdo con quienes integran el sector del entretenimiento nocturno en la ciudad, los ingresos han disminuido en sus negocios en más del 60% desde el inicio de la emergencia sanitaria en marzo del año pasado hasta la fecha, lo que ha ocasionado la pérdida de muchos puestos de trabajo.
Larissa Araque, propietaria del bar y restaurante Dos Toros, lamentó que durante el día las plazas comerciales y demás establecimientos que ofrecen servicio luzcan abarrotados y operen sin problema, que sin embargo, a los propietarios de centros nocturnos les restringen los horarios de atención.
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“Por lo menos estamos pidiendo que nos dejen cerrar hasta las 12:00 am, tenemos planillas que cubrir y son muchas personas que dependen de estos negocios, proveedores, guardias, meseros, muchos”, detalló Araque.
Maynor Rivera, dueño de Asados Del Bosque, indicó que su local ubicado en sector Stibys es uno de los que ha sido cerrado tras los operativos montados por la Policía Municipal y Policía Nacional en los últimos fines de semana, por lo que también se une a la petición de sus compañeros para que les autoricen atender hasta las 12:00 am.
Rivera anunció que hoy martes los propietarios de centros nocturnos, restaurantes, músicos, meseros y conductores de taxis, harán una protesta a las 8:00 am desde el puente por MegaMall hasta el parque central para exigir a las autoridades que les permitan trabajar. Unas de las medidas que buscan implementar los negocios nocturnos es pedir a los usuarios el registro de aplicación de vacuna o en su defecto la prueba de covid-19 para guardarla en una base de datos que sea útil para ellos.
Sanciones
El subcomisario Juan Sabillón, vocero de la Policía Nacional en la zona noroccidental, dijo que las inspecciones continuarán en la Capital Industrial debido a que hay normas de circulación que tienen que ser respetadas.Manifestó que de los más de 5o negocios cerrados el fin de semana, al menos 12 de los dueños fueron citados para que presenten la documentación requerida como permiso de operación vigente.
“Hemos identificado a muchos bares operando en casas, es decir, de manera clandestina, ahí no cuentan con permisos de operación, por lo tanto no pueden trabajar. Pedimos a la población que denunciar estos lugares porque generalmente operan en zonas residenciales”, sentenció Sabillón.
Alexander Leiva, director regional de la Secretaría de Trabajo, advirtió que las multas para los negocios que incumplan el toque de queda pueden ascender los 200,000 lempiras y el cierre de operaciones hasta que la pandemia termine.
Sonia Medina, jefa de la Unidad de Riesgos Sanitarios y Bioseguridad de la Dirección Policial de Investigación (DPI), señaló que en compañía de un grupo de especialistas integrado por microbiólogos, ingenieros químicos, médicos ocupacionales, entre otros, se encargan de ejecutar inspecciones en la empresas para verificar que emplean los protocolos de higiene.
Sinager extendió el toque de queda desde el 19 al 25 de julio a nivel nacional.
