San Pedro Sula
La expansión de los anillos de pobreza en San Pedro Sula es un mal que continúa sin el control de las autoridades.
Ciudadanos denunciaron a LA PRENSA que se instalan nuevas covachas a unos metros del nuevo vado del puente sobre el río Blanco, exactamente frente a la empresa Disagro en la calle que conecta el bulevar del norte con el segundo anillo.
Esta situación fue corroborada por periodistas de LA PRENSA que constataron que aparte de las viviendas improvisadas también hay cercos y cultivos de maíz en el bordo.
Del otro lado en dirección a la Universidad Tecnológica de Honduras (UTH) y enfrente de Altara también se han establecido en los últimos meses negocios de arena, lavado de carros y covachas.
Israel Rubí, docente, arquitecto y urbanizador, dijo que la alcaldía debe tomar acciones para evitar nuevos establecimientos en los bordos así como poner en marcha un plan para reubicar los antiguos habitantes en otros bordos.
“En principio que las autoridades actúen con los nuevos, no se puede permitir nuevas instalaciones, los sampedranos pagan una tasa de seguridad altísima y entonces para qué están las autoridades. Con los viejos habitantes de los bordos hay que hacer un tratamiento, porque se ha dejado de hacer por omisión, y se deben buscar alternativas como un proyecto macro con condiciones dignas para las familias”, comentó.
El profesional dijo que se debe instalar una policía montada que patrulle estos bordos no solo para evitar las instalaciones de covachas, sino estacionamientos y negocios en derecho de vía así, como el robo de gaviones y las otras obras de mantenimiento.
Rubí dijo que estos espacios deben estar ocupados por parques lineales y obras de infraestructura vial y a falta de esos se convierten en basureros o invasiones. Jaime Villegas, urbanizador, dijo que el Gobierno y alcaldía debe hacer un estudio integral y mover a las personas a un lugar con condiciones decentes.
