San Pedro Sula.
Victorino Carranza, presidente del
Gremio de la Micro y Pequeña Empresa (Gremype), manifestó que en el valle de Sula se está perdiendo más del 20% de los empleos.
Con la crisis sanitaria que ha afectado la economía de Honduras, los mipymes se han visto obligados a evolucionar e innovar en sus métodos de ventas para subsistir.
El servicio a domicilio o por ventanilla, además de las ventas por medio de redes sociales o páginas web son herramientas de las que han echado mano los micros, pequeños y medianos empresarios sampedranos para no verse obligados a cerrar y dejar sin empleo a cientos de colaboradores.
Para expertos, el primer paso es la capacitación, que ha sido clave para que las mipymes sepan operar utilizando las medidas de bioseguridad que puedan aprovechar la tecnología y saber cómo ofrecer sus productos y servicios a los consumidores en línea.
De forma gratuita, organizaciones como la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC) y el Centro de Desarrollo Empresarial (CDE) del valle de Sula están capacitando de manera virtual a muchos pequeños empresarios con años de experiencia y a nuevos emprendedores que al quedarse sin un empleo han optado por comenzar su propio negocio.
Esperanza Escobar, presidenta de la Asociación Nacional de la Mediana y Pequeña Industria de Honduras (Anmpih), dijo que previo a la pandemia ya se había observado un crecimiento de mipymes, porque jóvenes recién graduados buscan ser dueños de sus propias empresas y no ser contratados, ahora con la crisis económica muchos que se han quedado sin empleo deciden emprender.
Escobar explicó que la mipyme es un sector con mucha resiliencia, es decir que se adapta positivamente a los cambios.
“Un mipyme cierra y abre otro negocio, porque somos muy resilientes. Por ejemplo, tenemos un desarrollador de software y en estos momentos no está dando el servicio, entonces se puso a vender verduras y mascarillas”, contó.
La venta de alimentos, de insumos de bioseguridad y medicamentos naturales ha aumentado en estos tiempos.
“Hay quienes han invertido en productos que se están vendiendo, es decir, conformando un nuevo negocio porque el que tienen está parado”.
Apuntó que muchos que no creían en vender en línea ahora están utilizando las herramientas tecnológicas.
| Asesorías
El CDE cuenta con licencias para formar parte del proyecto impulsado por el Gobierno para mipymes con la empresa Kolau, deben contactarse con el CDE en Facebook. Para promover sus productos en una plataforma electrónica.
|
“Si nosotros hubiésemos recibido apoyo financiero hubiéramos generado entre 20,000 a 30,000 empleos este año. La mayoría de nosotros trabaja con tarjetas de crédito y con prestamistas”, apuntó.
Entre los rubros más afectados está la zapatería, cuero, la metal mecánica, textil y bisutería.
Rubros como alimentos y comercio en general están sacándole provecho a las redes sociales y plataformas web para dar a conocer sus productos y servicios.
Enfatizó en la importancia de capacitarse en temas contables y administrativos y en el uso de tecnologías.
Adaptación
Jannett Lagos, una microempresaria que se dedica a la venta de café en bolsa tostado, molido y en grano, ha sido capacitada por el CDE del valle de Sula de cómo vender en redes sociales, algo que no había realizado antes, pero al tener cerrado su local se vio obligada a hacerlo.“Me ha costado un poco la adaptación, pero si lo estamos vendiendo. Nosotros buscamos exportar, nos estamos capacitando”. Ayer recibió un entrenamiento sobre “cómo atender al cliente en línea”.
Fredy Rodríguez, gerente de Súper Sopas, compartió que antes que comenzara la pandemia el negocio apenas tenía cuatro meses de funcionar, sin embargo, decidieron seguir adelante ofreciendo sus sopas por medio de aplicaciones móviles, el servicio de ventanilla para llevar e incorporaron a un joven repartidor para abarcar a más clientes.
“Tenemos a tres personas en cocina y al repartidor, empleos que estamos dando. Nosotros nos promovemos en redes sociales”, indicó.
 |
