La colocación de hidrantes en puntos estratégicos de San Pedro Sula es una labor que llevan a cabo las autoridades con el objetivo de hacer frente a siniestros, sobre todo en zonas de los mercados.
Sin embargo, la poca capacidad de agua que tiene la mayoría de los hidrantes en la ciudad juegan en contra al momento de atacar un siniestro de grandes magnitudes, de acuerdo con el Cuerpo de Bomberos.
100,000
lempiras es el valor promedio de cada hidrante. El compromiso de las autoridades es colocar al menos 40 de ellos anualmente.
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“Hay algunos que solo tienen agua en las horas pico, pero sin duda estas son herramientas que nos ayudan mucho para aliviar un incendio”, manifestó Varela.
Agregó que junto con la Municipalidad y Aguas de San Pedro (ASP) cada miércoles se reúnen para hacer un recorrido y definir adónde instalarán nuevos hidrantes.
El contrato de concesión señala que los hidrantes que se instalen en el área comprendida del segundo anillo deberán ser de caja subterránea y en las otras zonas hidrantes tipo poste.
Representantes de ASP señalaron que en la Capital Industrial hay instalados alrededor de 1,100 hidrantes o bocas de agua, como también se les conoce, muchos de ellos en el centro, por ser una zona vulnerable.
Reconocen que deben trabajar en sectores como Cofradía y Chamelecón, ya que cuentan con pocos hidrantes.