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12:32 AM

Leonel Ayala: 'Esto solo es una reparación”

  • 18 abril 2021 /

La Comisión para el Control de Inundaciones solamente realizó reparaciones en el sistema de bordos afectados por las inundaciones de Eta y Iota.

San Pedro Sula, Honduras.

El secretario de Gobernación y Justicia, Leonel Ayala, quien a la vez es comisionado presidencial para el valle de Sula, advierte que la Comisión para el Control de Inundaciones solamente realizó reparaciones en el sistema de bordos afectados por las inundaciones de Eta y Iota y considera que para evitar nuevas catástrofes, el próximo gobierno tendrá que invertir en nuevos canales de alivio, represas y proteger el bosque del occidente del país.

¿Cuándo concluirán las reparaciones de los bordos?

Estimamos que para julio estará terminada la reparación de 220 boquetes que significan alrededor del 12% a 15% de daños en 900 kilómetros de bordos (entre 110 y 120 kilómetros inexistentes de bordo).

¿Estos bordos pueden soportar inundaciones como las de Eta y Iota?

El Centro de Prevención de Emergencias y Desastres para América Central dice que lo que cayó con Eta y Iota fue el triple de lo que precipitó el huracán Mitch y eso rebasó las posibilidades de cualquier sistema, pero estos son trabajos temporales. ¿A qué me refiero? Que esto es una reparación porque lo que viene consecutivamente es un instituto que va a generar un desarrollo sostenible en el valle de Sula y que, a la vez, va a trabajar en la prevención de este tipo de fenómenos, de inundaciones, y que va a tener una incidencia en el tema de las represas Llanitos, Jicatuyo y El Tablón.

También va a tener una incidencia en nuevos proyectos, porque el valle de Sula va a tener que hacer un análisis de cómo trabajar el sistema de canalización de las aguas. Posiblemente se tenga que hacer nuevos canales, construir nuevos canales, ampliar algunos sistemas y fortalecer algunos bordos con concreto o de otra forma más permanente. Es importante que entendamos que algo que va a ayudar de una manera clara es la prevención de incendios: si nosotros logramos en las cuencas altas evitar la deforestación seremos menos perjudicados en el valle de Sula; cuando se precipita el agua y no hay vegetación se va de manera directa al cauce, pero si hay vegetación, la vegetación absorbe.

Hay unas recomendaciones: hacer algunas represas secas donde no exista un propósito de generación de energía hidroeléctrica y para eso se está replanteando el tema de El Tablón. Posiblemente El Tablón sea una represa seca, donde el agua en su totalidad que venga de una crecida se va acumular en esa represa. Todo el agua que venga en una crecida se va a cumular y eso es muy importante para el control de inundaciones en la cuenca del Chamelecón. La cuenca del Chamelecón tiene una pendiente alta y rápidamente la crecida llega al valle.

¿Cuáles son los desafíos que va a enfrentar el próximo gobierno; de dónde puede obtener el dinero?

Si lográramos productivas esas represas, esa sería una manera de poder asegurarnos algún ingreso, otro puede ser que el sector productivo haga un aporte a este propósito; pueden ser fondos verdes. El presidente Juan Orlando Hernández está haciendo no solo la solicitud, sino la insistencia en que el país es tan vulnerable a los fenómenos climatológicos. Yo creo que ahí podrían estar los recursos, más la asignación del recurso presupuestario con base a la prioridad que tiene el valle (...). Aunque al final nosotros somos receptores de las aguas de las cuencas altas de Santa Bárbara, Lempira, Copán, Ocotepeque, por lo tanto, necesitamos que esas cuencas sean bien cuidadas y bien manejadas. Allí no tiene que haber ni quema, ni tala, ni deforestación, allí hay que trabajar sistemáticamente y esa es tarea de la Secretaría del Ambiente, Instituto de Conservación Forestal. Entonces, tenemos que trabajar concatenadamente entre este nuevo instituto, porque la Comisión Contra Inundaciones del Valle de Sula (CCIVS) no tenía facultades más allá de las que establece la ley y es más para hacer estas reparaciones. En realidad es una Comisión que siempre se visualizó de una forma provisional, transitoria, para que viniese una autoridad con mayor capacidad que pudiese incidir en algo más profundo: estudios, dragados, nuevas canalizaciones, fortalecimiento de los bordos (...). Nosotros tenemos que saber aprovechar esto y si existiese alguna empresa que en el desazolvamiento y en el dragado pudiese generar parte de su costo con la extracción del material, eso abarataría los costos.

¿En las islas del Caribe hay empresas interesadas?

Supe que en el pasado había una empresa que se dedicaba a eso y ahorita hay algunos profesionales del derecho de la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos (Insep) que están haciendo los análisis respectivos para ver si se puede volver a provocar esa propuesta y si eso se hace, pues obviamente bajarían los costos. Hay que dragar el Ulúa y el Chamelecón que se azolvaron desde el huracán Mitch. De La Lima, aguas abajo hasta el mar y desde El Progreso, aguas abajo hasta el océano y los canales de alivio, el canal Chamber, que alivia el Chamelecón, y el canal Martínez, que alivia el Ulúa.

¿La opción de construir las represas secas a partir de cuándo la comenzaron a discutir?

Esa fue una idea de los especialistas israelíes. Ellos la empezaron a proponer. Ellos vinieron e hicieron todo el análisis de todo lo que estaba pasando... y cuál era el tránsito de los ríos y cuál era la potencialidad que había en las represas. Se analizó que la represa de El Tablón generaba poca energía, estábamos hablando que en una temporada baja, 10 megas.

¿El Gobierno tendría que invertir?

Siempre hubiera sido así, aún con una represa hidroeléctrica no era autosostenible, siempre tenía que haber un componente de inversión del Gobierno. En este caso, se vería como una inversión propia del gobierno central. Para este tipo de proyectos siempre se encuentran recursos en los organismos de crédito internacional.