27/03/2024
08:42 AM

Aumentan los gritos de auxilio de hondureñas por violencia doméstica en cuarentena

Tegucigalpa y San Pedro Sula son los lugares que más han presentado incidencias de violencia doméstica durante el confinamiento por coronavirus, según las autoridades.

San Pedro Sula, Cortés.

La mujer sigue siendo en la mayoría de los casos, la víctima a merced del hombre con relación a la violencia doméstica en Honduras y en otros países del mundo, razón por la cual se acrecientan los casos sobre daños físicos, psicológicos, sexuales y patrimoniales en las familias.

El confinamiento por coronavirus en el mundo entero ha venido a disparar los gritos de auxilio de víctimas de violencia doméstica, quienes ahora conviven más tiempo con su agresor. El drama que viven las mujeres ha crecido con las medidas excepcionales que han establecido las autoridades desde el punto de vista de circulación, economía y de acceso a una justicia segura.

Solo en San Pedro Sula, casi 60 mujeres denunciaron violencia doméstica ante las autoridades en menos de un mes desde que empezó la cuarentena.

Para las víctimas, su casa no es un lugar seguro, ya que además de luchar para evadir el virus, viven una pesadilla con su pareja, principal receptora de gritos, menosprecio y golpes.

De acuerdo con datos proporcionados por la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), del 1 de marzo al 14 de abril de 2020, hubo 1,743 denuncias de violencia doméstica en todo el país y 1,019 de violencia intrafamiliar. Los mismos reportes registrados indican que se concretaron 101 detenciones por violencia doméstica y 368 por violencia intrafamiliar.

La mayoría de mujeres agredidas en sus hogares prefieren guardar silencio.
'Muchos casos solo quedan en denuncia, ya que las mujeres llegan a interponerla días después de lo ocurrido. En comparación con 2019, en estos cuatro meses de 2020 existió una reducción sustancial, puede ser por diferentes factores: porque la mujer tiene al maltratador en la casa, no puede salir debido al toque de queda y no hay transporte para movilizarse a las oficinas de la Policía, también porque la afectada piensa en qué dirán los vecinos, amigos o la familia', dijo una fuente de la DPI en la capital.

'Es importante mencionar que denuncias pueden haber muchas, pero si la mujer no lo reporta en el momento o llega después sin mostrar las respectivas evidencias, de nada sirve. También sucede en ocasiones que la misma mujer retira la denuncia y lo termina sacando', agregó.

Foto: La Prensa

Lucía Villars, portavoz del Poder Judicial en Honduras
Lucía Villars, vocera del Poder Judicial en Tegucigalpa, informó que del 18 de marzo al 16 de abril de 2020, hubo 26 detenidos infraganti por casos de violencia doméstica, más 70 denuncias por el ente acusador del Estado.

'A todos los que han llegado a los juzgados se les ha interpuesto las medidas que establece la Ley Contra la Violencia Doméstica, la cual refiere que el agresor debe salirse de la casa que comparte con la víctima, lo único que se puede llevar son objetos personales. Cabe mencionar que durante este confinamiento siempre los juzgados están atendiendo casos de violencia doméstica,', indicó Villars a LA PRENSA.

Código Penal vigente
Menciona que quien emplee fuerza, intimidación o haga objeto de persecución a su cónyuge o excónyugue para causarle daño físico, emocional o para dañar sus bienes, será sancionado con reclusión de uno a tres años sin perjuicio de la pena que corresponda a las lesiones a los hijos comunes o sobre los hijos de las personas mencionadas que se hallen sujetos a patria potestad.
A través del Ministerio Público ( MP) se conoció que los datos estadísticos resumen que a partir del 17 de marzo y hasta lo que va de abril, la mayor incidencia de violencia doméstica se ha dado en Tegucigalpa y en San Pedro Sula, con 121 y 83 denuncias respectivamente.

Nuevo Código Procesal Penal
Indica que quien en el marco de las relaciones desiguales de poder entre hombres y mujeres basadas en género, ejerce violencia física o psíquica sobre una mujer, debe ser castigado con las penas de prisión de uno a cuatro años, así como la multa de 100 a 300 días o prestación de servicios de utilidad pública o a las víctimas por el mismo tiempo.
A los datos anteriores se suman las atenciones de estas denuncias en El Progreso, Gracias Lempira, Santa Rosa de Copán, Talanga, Santa Bárbara, Siguatepeque, La Esperanza, La Paz, Danlí, entre otras ubicaciones.

Según información en poder de la Fiscalía Especial de la Mujer, el sistema 911 está atendiendo con bastante regularidad llamadas de usuarias que de forma desesperada buscan la intervención inmediata de la Policía Nacional. De acuerdo con datos obtenidos por el Sistema Nacional De Emergencias 911, los lugares con mayor incidencia de llamadas se ubican en los departamentos de Cortés y Francisco Morazán, específicamente: Choloma, Villa Nueva, Puerto Cortés, Distrito Central, Talanga, Guaimaca, Sabana Grande y Ojojona.

El proceso judicial

'La violencia se puede generar desde el punto de vista económico, psicológico, verbal, sexual y físico, aunque hay otro que no está tipificado por la ley que es el social, se trata de aquel en el que se aísla a la mujer para que no haya conexión con los demás', inició diciendo Alexa Solórzano, abogada y experta en temas de derechos humanos sobre la mujer y niñez en San Pedro Sula.

Foto: La Prensa

Abogada Alexa Solórzano
¿Cómo es un proceso judicial en estos casos? La profesional del Derecho explicó que lo normal en primera instancia es interponer la denuncia en una estación policial, la Fiscalía o en algún Juzgado de Violencia Doméstica, puede ser la víctima, algún pariente o vecino que conozca a detalle el hecho.

Las medidas básicas que se establecen son de protección y seguridad; es decir, una orden de alejamiento para proteger a la víctima ante un riesgo inminente. El agresor es citado a una audiencia, donde debe ir con un abogado, allí la carga probatoria siempre es contra el denunciado. Seguidamente, se lee la acusación, si el agresor acepta los hechos allí mismo concluye y se le determina una sanción de trabajo comunitario de unos tres meses o charlas psicológicas/familiares.

Contactos para denunciar o pedir apoyo ante violencia doméstica en Honduras
1. Al 911 o a la Fiscalía de la Mujer: 22376830/22376908
2. Centro de Derechos de Mujeres: 3397-8290/9752-1932
3. Foro de Mujeres por la Vida: 32877729
4. Conadeh: 9581-1846/95776042
5. Colegio de Psicólogos de Honduras: 9532-8538/8845-8592
6. La clínica del Hospital Materno Infantil brinda ayuda actualmente
7. Médicos Sin fronteras en Honduras: 3248-9517
8. Asesoría legal de la Unah: www.consultoriojuridico.unah.edu.hn; teléfonos: 9643-0756/ 9508-7913
9. Asesoría psicológica Unah: www.consultoriojuridico.unah.edu.hn; teléfonos: 8730-6563 y 9611-4646
Cuando la víctima tiene hijos con el agresor, también se establece una pensión alimenticia provisional para que éste la cumpla durante su ausencia en la casa. Este tipo de procesos normalmente duran entre tres a cuatro meses.

Si los hechos son reincidentes después de haber ya una sentencia como tal, el caso pasa a materia penal y por ende a nivel intrafamiliar, cuyo proceso puede demorar hasta un año, aquí el acusado puede perder, entre otras cosas, la patria potestad de sus hijos. Es muy importante que la víctima lleve como pruebas: audios, vídeos, testigos o también optar por un examen psicológico, el dictamen muestra el daño que hay en la persona afectada y con base a ello se puede emitir una resolución.

'También los hombres pueden ser víctimas, pero allí es más complicado, la mayoría no lo hace por su ego, lo otro es que casi siempre los jueces se inclinan por la mujer, ya que en algunos casos ella responde a alguna acción provocada por el hombre, por eso la investigación debe ser más minuciosa. Otro escenario que se da es que cuando el denunciado no acude a la audiencia en los juzgados, el juez toma como aceptados los hechos', agregó Solórzano.

De todos los casos por violencia doméstica que llegan a los juzgados, la mayoría son mujeres las afectadas y raras veces los hombres, todo ocurre por dependencia emocional, económica, de religión o tradición familiar, asegura la togada.

'Desde que inició el confinamiento en Honduras he tenido más de 20 casos, la mayoría de ellos dijeron que llamaban al 911 y no les contestaban o nunca les enviaban una patrulla. De todos los clientes, solo había un hombre en condición de afectado, y los hechos presentados se derivaron a través de violencia física, sexual, insultos verbales, empujones y humillaciones', manifestó la abogada en entrevista con la LA PRENSA.

Complejidad

En este momento de emergencia que vive Honduras por el coronavirus, resulta complicado realizar denuncias por violencia doméstica, afirmó el Foro de Mujeres por la Vida. Esta organización brinda apoyo psicológico y legal de forma gratuita a las hondureñas que sufren de abusos.

La abogada Karol H. Bobadilla explicó que recientemente recibieron el llamado de una mujer que había sido víctima de violencia junto con sus hijos y por parte de su esposo.

'Llamamos al 911 y nos dijeron que ella tenía que ir a la primera estación de Policía para poner la denuncia. La acompañamos y al llegar no había energía, por ende no se la pudieron tomar, así que esperamos. Cuando llegó el momento de que la jueza la atendiera, se dieron cuenta que tomaron mal los datos del caso, por lo que hubo que repetir la denuncia. Pasaron las 24 horas en que se podía establecer la denuncia y tanto ella como sus hijos tuvieron que regresar a casa a encontrarse con el agresor', dijo Bobadilla .

La abogada comprende que por la emergencia de COVID-19 estas instituciones estén trabajando a medio vapor, pero sostiene que es necesario que establezca una línea de acción funcional para que las víctimas por violencia no queden desamparadas.

'Es importante que capaciten correctamente a quienes atienden las denuncias porque muchas veces no lo hacen de manera correcta y desconocen los procesos. También es vital que haya albergues disponibles para ellas, porque cuando pasan por estas experiencias es necesario brindarles un espacio seguro', explicó Bobadilla .

Las víctimas de violencia doméstica pueden comunicarse con el Foro de Mujeres por la Vida, ya que a través de esta organización varias mujeres han logrado recibir salvoconductos para trasladarse de un lugar a otro y recibir el apoyo necesario.

La cuarenta ha exacerbado niveles de estrés e irritabilidad

La psicóloga Mónica Bueso explicó que la violencia doméstica ocurre en todos los estratos sociales y que no solo las mujeres son víctimas de ellas, ya que también los hombres sufren y no denuncian por temor al estigma social.

'Desgraciadamente esto ocurre muy seguido en las parejas, pero la cuarentena ha provocado que se detonen más casos por el estrés de la convivencia obligada, por no poder salir de casa o por la ansiedad de haber perdido un trabajo. Esto exacerba los niveles de estrés, aunque debemos tener claro que nada justifica este tipo de acciones', dijo Bueso.

Los tipos de violencia más comunes en el hogar son la psicológica y la física. 'La primera tiene que ver con las agresiones verbales, es decir, comentarios ofensivos y que lastiman, ya sean directos o sutiles. La segunda tiene que ver con los golpes físicos a la pareja', añadió Bueso.

Según explica la experta, hay que tener claro que una vez que se permite el primer acto de abuso y lo deja pasar, es seguro que puede continuar. 'Muchas veces los agresores culpan a la víctima por el acto de violencia diciéndole que es su culpa, si la víctima no recibe la ayuda necesaria es muy probable que caiga en manos de otro agresor, dado que su autoestima está dañada y no puede ver con claridad', afirmó.

Agregó que es vital que la persona se rodee de familiares y amigos cercanos que puedan brindarle apoyo. 'El agresor busca aislar para manipular más fácilmente y hacer sentir al otro incapaz de valerse por sí mismo y tomar decisiones, pero si la víctima se siente apoyada podrá tomar decisiones importantes, como de salirse de casa o denunciar, quizá esto hasta le pueda salvar la vida', finalizó diciendo.

Durante cuarentena

Durante la crisis por coronavirus atenderán los Juzgados de Paz Penales y Mixtos de todo el país, así como los Juzgados de Paz Civiles de los municipios en donde no hallan Juzgados de Letras competentes para conocer la materia de violencia domestica.

Todos los Juzgados deberán trabajar en la recepción de denuncias e imposición de
medidas de seguridad, así como recepción y entrega de pensiones alimenticias. Además, deberán velar por el cumplimiento de las medidas de seguridad impuestas, solicitando para tal efecto y en caso de ser necesario, el auxilio policial y remitiendo las diligencias al Ministerio Público en caso de existir algún incumplimiento de las mismas.

Más de 70 médicos forenses a nivel nacional asignados a las 27 clínicas forenses locales trabajan con normalidad dando atención a los usuarios y atendiendo instrucciones de la Dirección General de Medicina Forense.

Las clínicas forenses están ubicadas en las localidades de: Comayagua; Marcala; La Paz; La Esperanza; Siguatepeque; Choluteca; Nacaome; Juticalpa; Catacamas; Danlí; Yuscarán; Talanga; Santa Bárbara; Santa Rosa de Copán; La Entrada, Copán; Ocotepeque; Gracias; Lepaer; El Progreso; Puerto Cortés; Yoro; en el Litoral Atlántico y Aguán; Puerto Lempira; Tela; Roatán; Olanchito; Tocoa y Trujillo.

Además, personal forense trabaja las 24 horas en los Centros Integrados del Ministerio Público ubicados en Tegucigalpa, San Pedro Sula, La Ceiba, Santa Rosa de Copán y Comayagua.