'Estar enamorado es tener retortijones, siempre pensar en la persona que te gusta y sentir vértigo en los dedos de las manos y de los pies', asegura Cóbari. Él tiene 11 años de edad, pero responde como un experto cuando le preguntan qué es estar enamorado.
Ángel, que apenas tiene 8, y Vanessa, que ya cumplió 9, describen los síntomas. 'Te dan nervios, te alejas de la persona y corres', dice él.
'Te portas diferente, como decir cinco veces 'hola': 'hola', 'hola', 'hola', 'hola', 'hola'', cuenta ella. Niños y niñas expresan esos sentimientos de atracción como parte natural de su crecimiento, explica Mónica Duarte, psicoterapeuta especialista en niños y adolescentes.
A partir de los 5 o 6 años de edad se empieza un periodo que en el psicoanálisis se denomina 'latencia', en el que el niño se da cuenta que su padre o su madre tienen pareja y que ellos, eventualmente, también vivirán con una.
Este descubrimiento no tiene nada que ver con un deseo sexual consciente, continúa la especialista, está más relacionado con la idealización de alguien, el cariño y la necesidad de reconocimiento y de entender cómo funciona el mundo.
Es hasta la pubertad, a partir de la primer década, que biológicamente se apuntala un deseo más complejo, que se aproxima al enamoramiento adolescente.
No es puro romanticismo que Daniela, de 10 años, diga que tartamudea cuando ve al niño que le gusta, que se le pone la piel de gallina, que le late más rápido el corazón y se desorienta. Gerardo, de 11, parece estar leyendo un diccionario cuando describe el amor como una emoción que le hace tener atracción por alguien.
A ellos, de verdad, les está pasando algo, y se dan cuenta. De hecho, expresar y reconocer esta atracción siendo niños es algo positivo, y ello no debiera asustar a los padres, dice Duarte.
'Cuando un niño reconoce el enamoramiento, eso habla de un contacto con sus emociones, y quien reconoce sus emociones es más fácil que pueda comunicarse mejor con el otro. Esas manifestaciones pueden ser una puerta de entrada para hablar de esos temas con ellos', agrega.
Estar enamorado es.
'Te pones rojito y no quieres faltar a la escuela porque la quieres ver siempre y no le haces caso a las personas porque estás pensando en ella'.
Salvador, 10 años
'Siento mariposas en el corazón porque me gusta mucho y en las noches no puedo dormir porque pienso mucho en él'.
Blanca Estela, 10 años
'Cuando una niña o un niño mira alguien con una mirada medio babosa y no hace caso de nada'.
Diego, 8 años
'Siento que no quiero faltar a la escuela porque no lo quiero dejar de ver y odio las vacaciones'.
Ana Paola, 10 años
'A mí se me atonta el cerebro, me pongo nervioso, me retumba el corazón, siento como si volara'.
Hunab, 10 años
'Se siente que estás soñando y como si alguien en verdad te quiere por lo que eres y no por otra cosa'.
Teresa, 10 años
'Tristeza, alegría y amor, sientes muchas cosas. Ansiedad por estar con ella. Emoción, amistad y locura'.
Azael, 10 años
'Es tan fácil como saber cuándo tienes hambre o sed. Lo reconoces aunque nunca lo hayas sentido antes'.
Lu, 10 años
'Te hace soñar despierto que alguien quiere atacar a la niña que te gusta y tú vas a defenderla y le rompes la cara al malo'.
Omar, 9 años
