Cuide sus encías, puede afectar a su vida intima

El cuidado de la boca es fundamental para la salud, también para la sexual. Un estudio advierte de que una inflamación continuada de las encías puede alertar sobre la disfunción eréctil.

  • 10 mar 2021

SAN PEDRO SULA.

¿Qué relación hay entre unas encías inflamadas y la disfunción erectil? Si en principio parece que poca o ninguna, no es así.

El odontólogo Iván Malagón alude a recientes estudios, como el publicado por el Journal of Sex and Medicine, y explica que una enfermedad crónica de las encias, una periodontitis, es consecuencia de un problema en el flujo sanguíneo general y una primera señal para diagnosticar una disfunción eréctil.

Datos clínicos en los que se fundamenta el doctor Malagón ponen de manifiesto que a medida que aumenta la severidad de la disfunción erectil también lo hace la prevalencia de periodontitis crónica.

Cuatro de cada cinco hombres con este problema en su vida sexual también tienen inflamación de las encias.

Como consejos de carácter general, Malagón resalta la conveniencia de visitar al dentista anualmente; extremar los cuidados de la higiene dental; y cepillar no solo los dientes, sino también las encias.

El tabu de la disfunción eréctil
El doctor Malagón considera que la disfunción eréctil es todavía un tabú social y cuando se acude al especialista han pasado meses o años desde la aparición de los primeros síntomas.

La disfunción eréctil es la incapacidad para lograr y matener una erección suficiente que permita el desarrollo de una actividad sexual satisfactoria.

Esta dificultad, lejos de provocar verguenza y angustia, debe hablarse con la pareja desde la total confianza y visitar a un profesional que pueda ayudar a su resolución, empezando por el urólogo.

La impotencia sexual afecta a uno de cada diez hombres en todo el mundo y normalmente se experimenta después de los 40 años.

Para una vida sexual sana, y más allá del problema de la inflamación de encías, Malagón insiste en otros aspectos de la salud bucodental que deben cuidarse o evitarse, como el mal aliento o los dientes descolocados, rotos o amarillos, que restan atractivo y motivación a la vida sexual.