Amigos peligrosos para el matrimonio

Sin quererlo algunas amistades sociales, laborales o cibernéticas pueden ser un problema si no hay límites

  • 21 ene 2019

Es importante enfatizar que el tener pareja no significa que no podamos estrechar lazos de amistad con otras personas. Pero sí debemos saber actuar a tiempo antes de caer en situaciones que pongan en riesgo la estabilidad matrimonial; Por ejemplo, cuando empiezan a florecer sentimientos más profundos hacia un amigo o amiga.

No es la primera vez que una relación de matrimonio se ha terminado porque el esposo (a) buscó refugio en una amiga (o) y terminaron enamorados.

Estos son los tipos de amistades que debemos tener cuidado:

- Amistades sociales. Aquellos con los que sales a pasear todo el tiempo. En este tipo de amistades poco a poco se puede cruzar la línea del respeto, la privacidad e incluso la intimidad. Algunos hasta pueden llegar a compartir los problemas que mantienen con su cónyuge, motivo que sin darse cuenta los puede llevar a involucrarse sentimentalmente.

-Amistades en línea. Las redes sociales se han convertido en un peligro para los matrimonios, sobre todo si no se les da buen uso. Muchas personas se dan a la tarea de buscar a sus exparejas en las redes, por ejemplo, y no está bien. Un simple saludo puede remover sentimientos que se supone debieron haber terminado hace años, lo que puede dar lugar a nuevos romances que se tornan peligrosos.

-Amistades laborales. Estas amistades en muchas ocasiones se han convertido en la manzana de la discordia.

En el trabajo pasamos alrededor de ocho horas y nos relacionamos con todo tipo de personas. La chispa del amor puede surgir, pero al sentir los primeros síntomas de atracción o enamoramiento hacia un compañero (a), lo correcto es mantener distancia.

Evitar la convivencia innecesaria o conversaciones privadas para evitar caer en un enamoramiento.

El psicoterapeuta Antonio Escobar afirma que es saludable que una pareja tenga amistades. Ya sean amigos de trabajo, amistades de hace años, siempre y cuando se mantenga límites.

Si uno siente la necesidad de confiar una situación privada con un amigo (a) de confianza, está bien, pero guardando cierta cautela y reconocer que ese consejo u opinión sucede porque uno lo pide, no porque el amigo (a) se siente en el derecho de opinar al respecto de nuestra vida en pareja o nuestra relación.

Si uno siente la necesidad de confiar una situación privada con un amigo (a) de confianza, está bien, pero guardando cierta cautela

Para reflexionar:
1. Si te sientes atraído hacia otra persona, es momento de evaluarte. Sé sobre todo honesto contigo mismo y con tu pareja. Algo no está bien en tu matrimonio, si te gustan una o más personas.

2. Si te gusta otra persona que no es tu cónyugue, lo mejor es limitar la comunicación. Evitar estar a solas. Ser cordial, pero sin caer en pláticas comprometedoras. No caer en tentación depende de ti.


3. El respeto y una buena comunicación son las bases para que una pareja resuelva sus conflictos emocionales y sentimentales.

4. Si desean descubrir el origen de sus problemas conyugales, la terapia en pareja es una buena opción.