Algunas de ellas hacen crecer a la pareja de tal manera que con tan solo verse podrían adivinar qué están pensando y comienza a existir tal complicidad que su relación generalmente es armoniosa. Sin embargo, también existen otras parejas que por lo general discuten por cualquier cosa y la mayor parte del tiempo se les puede ver tristes y hasta sin amor, pero siempre juntas.
Y una de las razones más poderosas para que esto suceda, independientemente de los hijos, es el sexo, explica la terapeuta Danahe Rosales.
-La relación es tóxica. Por lo regular estas parejas no se pueden poner de acuerdo en nada y solo lo hacen al momento de tener una relación sexual.
-Hay más odio que sexo. Aunque pueda sonar muy extraño es tanto el daño que se hacen que suelen ya odiarse, pero su química sexual es más fuerte que su autoestima.
-Por lo regular hay un dominante. Esa parte de la pareja ejerce su sexualidad para “retener” a su pareja y por lo general es la parte más débil en cuanto a su propia estima.
-Buscan encuentros sexuales en todo momento. Cuando están estables buscan comunicarse por medio de su piel.
