19/04/2024
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El idioma

  • 25 abril 2015 /

El 23 de abril es destinado también a la promoción del libro como una de las expresiones más consagradas del lenguaje mediante la creatividad

    Esta semana el grito anhelante, reflejado en los medios de comunicación, demandó la acción inmediata, personal y comunitaria, en defensa de la Tierra, cuya deteriorada salud golpea a los causantes del estado de malestar en que se encuentra el planeta: El cambio climático, con El Niño y La Niña, con la desertización, la contaminación y la explotación irracional del bosque y el avance de las fronteras para favorecer la agricultura y la ganadería intensivas, es presentado como enemigo desafiante, pero la enemistad evidente es la del humano, el mayor riesgo y peligro entre los vivientes para el planeta.

    El día siguiente, el calendario cívico marcó el Día del Idioma, jornada en recuerdo del final de la trayectoria existencial del maestro de las letras castellanas, cuya obra, novela, poesía y teatro, conjuga el quehacer diario de los protagonistas con los sentimientos, ilusiones y utopías, reflejando la dimensión sin límites de la locura o del pragmatismo de las personas.

    El algunos lugares, el 23 de abril es destinado también a la promoción del libro como una de las expresiones más consagradas del lenguaje mediante la creatividad, en la trama, argumento o exposición, y el correcto y bello uso del lenguaje con la muestra de elementos simbólicos y culturales con los que se produce la identificación en sociedad al utilizar código común, cuyo efecto es la comunicación.

    Esa es la explicación académica en la que se analiza al emisor, el que habla, escribe o señala; el receptor, a quien se habla, para quien se escribe y advierte; y el mensaje o contenido, lo que se habla, escribe o se apunta. Esto tan elemental necesita otro elemento para que haya comunicación. El código, que no es otro que el lenguaje, en nuestro caso el español o lo que tradicional o clásicamente se denominaba la lengua castellana, amarre de nuestra cultura.

    Los modismos proporcionan gracia e identificación particulares de lugares y personas oficializados por la Real Academia de la Lengua, de manera que tan vocablo del idioma sea una palabra usada en la península, como otra con significado similar en la Tierra de Fuego, en los Andes o en el corredor centroamericano.

    Pero, el uso de la tecnología y, en no pocas ocasiones, la exigencia de disminuir el uso de caracteres para ahorrar espacio e incrementar las oportunidades de comunicación va creando un código, llamémoslo cibernético o tecnológico, con evidente, reiterada y masiva adulteración de la escritura. Las redes sociales y la transcripción literal de mensajes en los medios acelera los cambios en las palabras de manera que la nebulosa de la z, c y la s, la q y la k, así como otras originadas en la eliminación de vocales van creando un instrumento de comunicación eficaz para las generaciones de los blogs, Watsap, Twitter y redes sociales.

    A los casi 400 años de la muerte del Caballero de la triste figura, el español en permanente actualización es sacudido con violencia a la espera de la “auto reinvención” como exigencia de la tecnología y los modernos medios de comunicación dominantes.