Diálogo, negociaciones, nueva estructura, encuentros muy cercanos de tipos restringidos, pero en el mayor de los sigilos que por un rato hicieron pensar que algo nuevo venía con motivo de la renovación del convenio del Estado de Honduras con la Organización de Estados Americanos (OEA). Pero la fórmula propuesta no cuajó y el convenio de la Maccih finalmente no se renovó. En la lucha contra la corrupción, el temor generalizado es que al irse la Maccih se abre de nuevo la ruta a la actuación secular del dejar hacer dejar pasar.
La preocupación por el retroceso se comenzó a multiplicar con la renuncia de la vocera de la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras que, pese a la explicación oficial, no despejó las dudas, pues resultaba sumamente inoportuno y oscuro apelar a “motivos estrictamente personales y profesionales”. La alta responsabilidad, el interés que se hallaba en juego y la lealtad en el cumplimiento de la misión no encajaban en tan simple explicación, aunque se le reconoce el derecho a dejar el cargo.
En la edición del jueves, LA PRENSA dio a conocer el contenido del acuerdo que se estaba negociando para renovar la Maccih. El trabajo periodístico presentó los diez pilares que se proponían para la lucha contra la corrupción y la impunidad, así como las instituciones y organismos que estarían trabajando con el organismo.
Era tan complejo y extenso el campo de acción que el “tino” se iría diluyendo sin que pegara en el blanco, al menos en aquellos casos más significativos que no serían muchos. Pero ya el Gobierno hondureño informó ayer viernes que ese diálogo iniciado con la OEA para una segunda etapa de la Maccih concluyó sin ningún acuerdo entre las partes.
En un comunicado de la Secretaría de Relaciones Exteriores de Honduras, el Gobierno e_SDLqlamenta que a pesar de los esfuerzose_SDRq realizados para que la Secretaría General de la OEA acompañara al país en la e_SDLqpropuesta de construcción de un nuevo sistema integral de transparencia y lucha contra la corrupción e impunidad y fortalecimiento del Estado de derecho no alcanzamos los consensos para la firma de un nuevo convenioe_SDRq.
La Maccih era la primera iniciativa de la OEA para combatir la corrupción en un Estado miembro y su mandato concluirá mañana, con la judicialización de 14 casos.
Falta ver qué se hará para que este problema endémico de la corrupción y la impunidad verdaderamente merme, porque ya ha dejado demasiadas llagas en Honduras.
