18/04/2024
07:35 PM

Biden: su política exterior

Sergio Banegas

La política exterior de los Estados Unidos siempre ha sido objeto de señalamientos de ser injerencista y de llevar en su genotipo la marca de la influencia global con el pretendido objetivo de dominio geopolítico.

El nuevo inquilino que desde enero ocupa la Casa Blanca ha dado señales que dan un giro a las estrategias que Trump tuvo en las relaciones internacionales: Biden tiene énfasis en un mayor impulso a las relaciones multilaterales y no un nacionalista “América primero”. Es así que la agenda incluye tener muy cercano a Anthony Blinken como secretario de Estado, un diplomático de familia judía, quien es un preconizador de las alianzas multilaterales y creyente en la vigencia del llamado vínculo transatlántico.

Por ello se le ha relacionado con un perfil de “intervencionista liberal”, no nos sorprende entonces que la primera salida oficial de Biden haya sido para tratar de arreglar las relaciones con los pesos pesados del Viejo Continente. El nuevo Gobierno norteamericano no olvida que la Unión Europea puede y debe ser un gran aliado, más ahora que el Reino Unido está fuera del bloque. Esta posición es contraria a la política de relaciones bilaterales que promovía Trump, más bien negociar con todo el bloque puede traer enormes ventajas, sobre todo comerciales.

Otro frente a tomar es que según predicciones para final de esta década China se convertirá en la nueva potencia económica mundial relegando a EE UU a la sombra de la segunda posición, asunto que los norteamericanos están combatiendo. En cuanto a sus relaciones con América Latina, el país del norte ya envió a su Vicepresidenta a regañar cual si fuesen niños mal portados a los presidentes de Guatemala y México; ya veremos cómo aborda el tema de Venezuela y Cuba, quizá con más diplomacia y menos gritos vociferantes. Al final de cuentas no se trata de izquierdas o derechas, sino de intereses comerciales y de influencia dominante en el mundo de la geopolítica.