19/04/2024
11:01 PM

La época del coronavirus  

Emilio Santamaría

Margarita y yo cumplimos años de casados hace unos días. En ocasiones anteriores nos reuníamos con nuestra familia y lo celebrábamos en algún restaurante o con un pastel en mi casa; pero este año lógicamente tenía que ser diferente. Estamos en “cuarentena” en casa; pero mis hijos nos contactaron por zoom y en la pantalla de mi pequeña laptop aparecieron todos, cada uno en su casa. Lo maravilloso es que estuvimos reunidos con una plática muy animada, mis hijos con sus familias en Tegucigalpa, en San Pedro Sula y, lo más maravilloso, una de mis nietas desde Pamplona, España, y otro desde Querétaro, México. Total cuatro hijos, una nuera, un yerno, seis nietos, todos muy dispersos geográficamente, pero juntos enlazados por internet. La pandemia del Covid-19 está trayendo cambios a nuestro estilo de vida. La palabra coronavirus se pronuncia y se escribe miles y miles de veces constantemente. Al quedar confinados en nuestras casas, muchos de los negocios se han paralizado. Se habla de una crisis de proporciones apocalípticas. Se cuentan por miles ya los contagiados diariamente, y por centenares la gente que muere.

Pero no todo ha sido malo. ¿Recuerda el nombre de Wuhan? Es la importante ciudad de China donde se detectó por primera vez el coronavirus en el pasado diciembre, pues déjeme contarle que sus habitantes se han sorprendido del inusual y fantástico color azul de su cielo, producto de la falta de automóviles contaminando el aire, y se nos dice que en Venecia, sorprendentemente, los canales se han vuelto tan transparentes que se pueden ver en el fondo los peces nadando libremente. ¿Tendrá un final esta pesadilla del coronavirus? El profesor Dale Carnegie, fundador de los mundialmente famosos entrenamientos que llevan su nombre, nos dijo: “La mayoría de las cosas importantes en el mundo han sido logradas por personas que lo han seguido intentando cuando parecía que no había ninguna esperanza”. Puede usted confiar en que hay cientos de científicos en todo el mundo tratando de encontrar un tratamiento o una vacuna.

LO NEGATIVO: Concentrarnos en todo lo malo que ha traído para nuestro estilo de vida el Covid-19.

LO POSITIVO: Comprender que estamos en una época de cambios, aceptarlos y tratar de entenderlos.