23/04/2024
12:01 AM

El precio del menosprecio

Emilio Santamaría

Robert Kearns fue un ingeniero norteamericano que inventó el limpiaparabrisas intermitente. Cuando un automóvil marcha en medio de la lluvia, el conductor acciona una palanquita y el limpiaparabrisas empieza a funcionar. Normalmente tiene varias velocidades: si la lluvia es muy intensa lo hace funcionar rápidamente, pero si apenas caen unas gotas, lo puede poner en intermitente, y así solo funcionará por momentos, lo que resulta muy cómodo. Eso fue justamente lo que inventó el Ing. Kearns. Entre 1963 y 1967 trabajando desde el garaje de su casa, Kearns obtuvo 30 patentes, entre ellas, el limpiaparabrisas intermitente. Entusiasmado por su invento, corrió a llevarlo a la planta de Ford en River Rouge, pues soñaba con ser un proveedor importante de la marca que lo fascinó desde niño; pero los ingenieros que observaron su demostración la descartaron. Pasaron dos años y el inventor se dio cuenta de que Ford equipó sus modelos Mustang y Mercury Cougar con limpiabrisas intermitentes. Kearns, que se había sentido menospreciado al ser rechazado, ahora saltó indignado. Ford alegó que uno de sus ingenieros había investigado desde 1957 con ese aditamento, pero eso no le valió en los tribunales. Pero fue peor aún, se dio cuenta de que su invento corrió rápidamente entre los fabricantes de autos. Compró un repuesto de motor limpiaparabrisas de Mercedes Benz y al desarmarlo se dio cuenta de que era idéntico al suyo. Entró en una crisis nerviosa y su familia lo internó en un hospital psiquiátrico. Salió muy desmejorado, pero con una obsesión, demandar a los fabricantes de automóviles. Fue primero por Ford, luego con Chrysler, y así sucesivamente. Decidió representarse personalmente y en algunos casos el juez desestimó su demanda. Rehizo sus argumentos y, tras muchos años, el juicio a Ford se resuelve en 1990: lo condenaron a pagarle 10.1 millones más costas y Chrysler tuvo que entregarle 18.7 millones. Reunió más de 80 millones de dólares en demandas, que pagaron los que lo habían menospreciado. A los 77 años le diagnosticaron alzhéimer y murió poco después; sin embargo, pasó a la historia como alguien que cobró caro el ser menospreciado.

LO NEGATIVO: Menospreciar a aquellos que por alguna razón consideramos inferiores.
LO POSITIVO: Al pensar con rectitud de los demás ahorraremos dinero y, además, es lo correcto.