Turquía.
Olesya Suspitsyna, una joven de 31 años oriunda de Kazajstán, fue sorprendida por la muerte cuando menos lo esperaba.
La joven, que en Turquía vivía como guía turística, murió luego de tomarse una selfie con la que celebraba el fin de la cuarentena por el coronavirus COVID-19.
La chica tuvo la intención de dar un respiro en la naturaleza, hábito que la pandemia por coronavirus le había privado, por lo que junto con una amiga se fue a uno bonito parque en Turquía.
De acuerdo al diario Daily Mail, el lamentable suceso ocurrió en el parque Duden, de la ciudad de Antalya. El lugar es conocido por sus cascadas y por sus increíbles vistas.
Todo iba en armonía hasta que la mujer decidió tener una fotografía en un lugar arriesgado. Olesya Suspitsyna se subió al borde de un acantilado, incluso, saltó el cordón de seguridad para que el bello momento quedara inmortalizado. Sin embargo, justo cuando su amiga la estaba retratando con una cámara, la joven perdió el equilibrioi y cayó al vacío desde 35 metros, señala Daily Mail.
Su amiga vio la impactante escena, por lo que llamó inmediatamente a los servicios de emergencia, pero cuando llegaron encontraorn e cuerpo de Olesya en el agua y sin vida.
Olesya pasaba encantada de su trabajo como guía turística en Antalya, ciudad en la que estuvo los últimos cinco años de su vida. “Siempre admiraré la belleza de la naturaleza turca. Este es mi paraíso”, publicó recientemente en Instagram.
Olesya Suspitsyna, una joven de 31 años oriunda de Kazajstán, fue sorprendida por la muerte cuando menos lo esperaba.
La joven, que en Turquía vivía como guía turística, murió luego de tomarse una selfie con la que celebraba el fin de la cuarentena por el coronavirus COVID-19.
La chica tuvo la intención de dar un respiro en la naturaleza, hábito que la pandemia por coronavirus le había privado, por lo que junto con una amiga se fue a uno bonito parque en Turquía.
De acuerdo al diario Daily Mail, el lamentable suceso ocurrió en el parque Duden, de la ciudad de Antalya. El lugar es conocido por sus cascadas y por sus increíbles vistas.
Todo iba en armonía hasta que la mujer decidió tener una fotografía en un lugar arriesgado. Olesya Suspitsyna se subió al borde de un acantilado, incluso, saltó el cordón de seguridad para que el bello momento quedara inmortalizado. Sin embargo, justo cuando su amiga la estaba retratando con una cámara, la joven perdió el equilibrioi y cayó al vacío desde 35 metros, señala Daily Mail.
Su amiga vio la impactante escena, por lo que llamó inmediatamente a los servicios de emergencia, pero cuando llegaron encontraorn e cuerpo de Olesya en el agua y sin vida.
Olesya pasaba encantada de su trabajo como guía turística en Antalya, ciudad en la que estuvo los últimos cinco años de su vida. “Siempre admiraré la belleza de la naturaleza turca. Este es mi paraíso”, publicó recientemente en Instagram.
