Las diferencias entre una pareja divorciada sobre la crianza de su hija llevarán a la madre a cumplir una sentencia de siete días de cárcel por bautizar sin el permiso del padre.
El hecho se suscitó en Charlotte, Carolina del Norte, en un caso que lleva dos años de batalla legal entre Kendra Stocks y Paul Schaaf por la custodia de su hija. El tribunal que lleva el caso le otorgó al padre de la menor la autoridad final para todas las decisiones de custodia legal, incluidas las relacionadas con religión.
Pese a la disposición de las autoridades, Stocks decidió bautizar a su hija sin el consentimiento de su padre, lo que Schaaf descubrió a través de Facebook.
 La madre publicó en Facebook sobre el bautizo de la menor. Foto/Redes.
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“Tengo miedo. Es muy triste. Todo esto es una situación triste. Pasaré esto y espero salir como una mejor persona“, declaró Stocks desde prisión a la cadena WSOC.
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El apoderado legal de Schaaf subrayó que la condena no es por el bautismo en sí, sino por ignorar la decisión del juez. “Para que el sistema funcione, debe haber consecuencias para una violación intencional a una orden de la corte“, indicó.
“Me arrepiento de que el padre no haya participado del bautismo, pero no me arrepiento de criarla en la fe católica, que es lo que ambos queríamos”, agregó la madre, que logró rebajar la condena inicial de 10 días
Schaaf es un católico practicante que asiste a misa todas las semanas y duró con Stocks apenas seis meses.
