El fusil semiautomático que utilizó James Holmes en la masacre en el cine Century 16 en Aurora, durante una función de medianoche de la película de Batman se atascó, lo que lo obligó a usar otra arma con menos poder de fuego y eso evitó más muertes, reveló un agente federal a The Associated Press.
La fuente, que solicitó el anonimato para hacer declaraciones sobre la pesquisa, informó que el arma inutilizada tenía un cargador de municiones de alta capacidad. La Policía informó que halló en el lugar un cargador para 100 cartuchos, el cual permitía efectuar entre 50 y 60 disparos por minuto.
Este relato de lo ocurrido en el interior del cine Century 16 surgió junto a otros detalles en los que se describe al implicado como un científico en ciernes, lleno de potencial, que pretendía seguir un programa de graduación aun cuando había planeado el ataque de manera “calculada y deliberada”, informó la Policía.
James Holmes (24) recibió varios pedidos por correo que las autoridades creen le sirvieron para armarse hasta los dientes y colocar decenas de trampas explosivas en el lugar adonde vivía.
En Aurora, los investigadores retiraron durante varias horas materiales explosivos del interior del apartamento de Holmes, un día después de que la Policía dijera que el implicado abrió fuego y activó un cartucho de gas dentro de un cine, minutos después de iniciar el estreno de la cinta The Dark Knight Rises. En el tiroteo, 12 personas murieron y 58 resultaron heridas. En el apartamento había frascos con líquidos, sustancias químicas y explosivos dispersos de tal manera que matarían a “quienquiera que ingresara”, dijo el jefe de la Policía de Aurora, Dan Oates.
Holmes había recibido en su casa y escuela varios pedidos por correo durante cuatro meses y compró por Internet miles de cartuchos para armas.
Luto y dolor
Numerosas familias hispanas se acercaron para rendir un homenaje a las víctimas del tiroteo del viernes pasado en un cine de Aurora, una localidad en la que más de un cuarto de la población es latina y donde se instaló un improvisado altar a pocos metros del lugar de la tragedia. “No sé cómo salimos del cine. Creo que fue porque Dios así lo quiso. Es todo lo que puedo decir”, declaró Rodríguez, quien se salvó de morir. Ella y sus hijos llevaron globos rojos, que ataron a un árbol, a unos 100 metros de la parte trasera del cine Century 16.
“Lo único que quiero hacer es abrazar y besar a mis hijos”, dijo a Efe Amanda Rodríguez, la que se encontraba en la sala 9 del cine “Century 16” con Juan, de 15 años, y Kimberly, de 10, cuando Holmes irrumpió a pocos minutos de comenzada la película.
Jorge Pacheco, originario de Guerrero, México, y ahora residente en Aurora, llegó con su esposa, su suegra y sus hijos hasta el altar popular para rezar por las víctimas y sus familias.
“Me siento muy triste. Al ver las flores y las cruces se me ablandó el corazón. Pienso en esas buenas personas que perdieron su vida en un lugar que creíamos que era seguro”, dijo Pacheco.
Les lleva consuelo
El presidente Barack Obama buscó dar alivio a familias en Colorado apesadumbradas por el ataque a tiros ocurrido dentro de un cine.
El avión del Presidente aterrizó en la base militar Buckley Air en Aurora por la tarde para la apresurada visita de Obama de dos horas y media. Poco después, el mandatario comenzó la visita con los familiares de las víctimas en el Hospital de la Universidad de Colorado, donde atendieron a 23 de los heridos; 10 permanecen ahí, siete de ellos en condición grave.
El papa Benedicto XVI se manifestó “entristecido” por la masacre del viernes pasado en Aurora. Durante un saludo en inglés, pronunciado ante peregrinos de varias partes del mundo dijo:
“Imparto a todos mi bendición como una promesa de consuelo y fuerza en el Señor”, apuntó.
