25/04/2024
09:17 AM

Hoy comienza la etapa final del juicio político contra Dilma Rousseff

  • 24 agosto 2016 /

Sao Paulo, Brasil.

La presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff afirmó ayer que irá personalmente a defenderse en el Senado, que mañana iniciará un juicio político en su contra, porque cree en la “democracia” del país y su presencia “incomodará” a quienes la acusan.

Rousseff, durante un discurso en Sao Paulo en el marco del Acto en Defensa de la Democracia y de los Derechos Sociales calificó el juicio con fines destituyentes como “un ataque de parásitos al árbol de la democracia”, en el que ellos “asumen lentamente el control de partes del árbol”.

“Voy al Senado porque creo en la democracia de este país. Debo eso al pueblo brasileño. Voy allá no porque creo en la belleza de mis ojos. Tengo absoluta claridad de lo que están haciendo. Sé que es injusticia y mi presencia es extremadamente incómoda”, agregó.

Rousseff es acusada de maniobras fiscales para maquillar el informe de las cuentas públicas en su gestión de 2014 y 2015.

“El ‘golpe’ (como es llamado el proceso de juicio por parte de los simpatizantes de Rousseff) no es apenas militar, es una nueva versión que pasó a ser implementada en América Latina. Es un ‘golpe’ parlamentario”, manifestó la presidenta, quien fue separada temporalmente del cargo el 12 de mayo. En su lugar, asumió la Presidencia interina el entonces vicepresidente, Michel Temer, quien ya se había distanciado de la mandataria y en caso de Rousseff ser separada definitivamente del cargo terminará el mandato hasta el 1 de enero de 2019.

Hora de la verdad

Hoy, el Senado brasileño inicia el voto para decidir si Rousseff es destituida definitivamente. Nadie duda de que el “Fora Dilma” que sonó tanto en las calles brasileñas será pronto una realidad. Entre 58 y 61 senadores están dispuestos a votar contra ella, según los sondeos. Bastante más del mínimo de dos tercios requerido. Para su destitución definitiva se requieren 54 votos.

Es improbable que Dilma regrese al palacio de Gobierno”, opina Paulo Eduardo Gomes, un político de Niteroi, ciudad vecina a Río de Janeiro. “Ella es un chivo expiatorio, se la responsabiliza de las faltas cometidas por su partido, el Partido de los trabajadores (PT)”, dice Gomes a Deutsche Welle.

En las primeras dos jornadas se escuchará a los testigos de la acusación y de la defensa. El día 29 Rousseff declarará ante el Senado e intentará convencer a los últimos indecisos. Se espera que la votación definitiva sea el 31 de agosto.