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Narcosobrinos de Nicolás Maduro aceptan que son culpables

  • 25 julio 2016 /

Nueva York, Estados Unidos.

Los dos sobrinos del presidente venezolano Nicolás Maduro, acusados de ser parte de un plan para introducir droga a territorio estadounidense vía Honduras, admitieron su culpabilidad ante la agencia antidrogas estadounidense, DEA, según documentos oficiales.

Los detalles de la confesión de Efrain Antonio Campo Flores y Francisco Flores de Freita son parte de un expediente enviado por la Fiscalía Federal a una corte de Manhattan, en Nueva York, adonde quedaron en evidencia sus reuniones en Honduras con un supuesto capo mexicano que en realidad era un agente encubierto de la DEA.

En el caso también está involucrado el hondureño Roberto de Jesús Soto García, sobre quien pesa una orden de extradición por supuestamente negociar el traslado de droga con los narcosobrinos, según el Nuevo Herald. Soto García se habría reunido con Campos y Flores en San Pedro Sula en noviembre de 2015. Durante el encuentro, Soto explicó cómo él y sus socios recibirían un cargamento en el aeropuerto de Roatán, Islas de la Bahía, según la Fiscalía de Nueva York.

Soto aseguró que el avión podía ser descargado y reabastecido en 20 minutos y dijo que el vuelo sería legítimo si los pilotos trasladaban pasajeros a Roatán.

Foto: La Prensa

La fiscalía también presentó imágenes de Campos inspeccionando la droga.
Guerra

Según los documentos, “Campo le dijo a dos fuentes durante una reunión que fue grabada:

‘Estamos en guerra contra EUA’”. Y durante encuentros que tuvieron lugar en Venezuela, Honduras y Haití, los demandados hablaron de múltiples transportes con carga de cocaína en aviones privados, con el entendimiento inequívoco de que los narcóticos terminarían en Estados Unidos, en conexión con transacciones que esperaban que generaran millones de dólares de ingresos”, se lee en el documento.

El inicio del juicio contra los narcosobrinos fue fijado para el 7 de noviembre.

El Gobierno de Maduro se ha mantenido en silencio sobre las acusaciones. La primera dama Cilia Flores dijo que va “a esperar que la justicia hable”.