California, Estados Unidos.
La justicia finalmente llegó para un inmigrante mexicano que salió de prisión esta semana tras permanecer 16 años encarcelado, sentenciado por violaciones, delito que su abogado logró comprobar que no cometió, informaron las autoridades judiciales del estado de California, EUA.
Luis Vargas era residente legal en Estados Unidos y originario de Tijuana, México. Sin embargo, perdió su calidad migratoria en el país por lo que, tras ser dejado en libertad, fue entregado al Servicio de Inmigración y Ciudadanía.
Vargas siempre insisitió en su inocencia. Las pruebas de ADN descubrieron que los delitos por los que el hispano fue condenado fueron cometidos por el llamado Teardrop Rapist (Violador de la Lágrima), quien es conocido por un tatuaje de una lágrima cayendo de un ojo, afirmó Saunders.
El violador de la lágrima está vinculado a 11 delitos y es sospechoso de 35 en total en toda el área de Los Ángeles, aseguró el Proyecto Inocencia de la California Western School of Law, que se hizo cargo del caso de Vargas en 2012.
Vargas vivía cerca de una de las zonas en las que se produjeron algunos asaltos y fue identificado por varios testigos por un tatuaje similar al del violador. En 1999 fue sentenciado a 55 años en prisión por tres violaciones, pero mientras estaba entre rejas las agresiones siguieron produciéndose.
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El mexicano contactó con los abogados del proyecto California y les contó que creía que las violaciones de las que se le acusaban eran obra del 'violador de la lágrima'.
