Tegucigalpa, Honduras.
Cientos de hondureños se congregaron este jueves en el parque Simón Bolívar, al este de la capital, para rendir homenaje al expresidente de Venezuela, Hugo Chávez, al cumplirse el segundo aniversario de su muerte.
'¡Chávez vive!', '¡Viva Chávez!', gritaron unos 500 bulliciosos hondureños, la mayoría indígenas lencas, habitantes del occidente del país, y negros garífunas, del litoral Caribeño, que bailaron al son de música de tambores.
'Es honroso asistir a esta muestras de la solidaridad de este pueblo hondureño' con Chávez, afirmó el embajador de Venezuela en Honduras, Filinto Durán, quien acompañó a los manifestantes.
Añadió que los hondureños 'son un pueblo agradecido con el comandante', que los favoreció a través de la adhesión de Honduras a la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA) durante el gobierno del derrocado presidente Manuel Zelaya.
Chávez, quien murió de un cáncer que combatió por casi dos años, suscribió con Zelaya la adhesión de Honduras al ALBA en 2008 en Honduras.
Zelaya fue derrocado el 28 de junio de 2009 por una alianza político-militar que adversaba su giro a la izquierda tras llegar al poder con el respaldo del derechista Partido Liberal.
Cientos de hondureños se congregaron este jueves en el parque Simón Bolívar, al este de la capital, para rendir homenaje al expresidente de Venezuela, Hugo Chávez, al cumplirse el segundo aniversario de su muerte.
'¡Chávez vive!', '¡Viva Chávez!', gritaron unos 500 bulliciosos hondureños, la mayoría indígenas lencas, habitantes del occidente del país, y negros garífunas, del litoral Caribeño, que bailaron al son de música de tambores.
'Es honroso asistir a esta muestras de la solidaridad de este pueblo hondureño' con Chávez, afirmó el embajador de Venezuela en Honduras, Filinto Durán, quien acompañó a los manifestantes.
Añadió que los hondureños 'son un pueblo agradecido con el comandante', que los favoreció a través de la adhesión de Honduras a la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA) durante el gobierno del derrocado presidente Manuel Zelaya.
 El sacerdote jesuita Fausto Milla celebró una misa en honor al fallecido presidente Hugo Chávez.
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Zelaya fue derrocado el 28 de junio de 2009 por una alianza político-militar que adversaba su giro a la izquierda tras llegar al poder con el respaldo del derechista Partido Liberal.
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La adhesión al ALBA significó una donación por parte de Venezuela de 100 millones de dólares y 100 tractores en apoyo al sector agrícola de Honduras, así como el suministro de combustible en condiciones favorables a través de la iniciativa de Petrocaribe.
El gobierno de Roberto Micheletti, que asumió tras el derrocamiento de Zelaya, excluyó a Honduras del ALBA.
