23/04/2024
02:36 AM

España: PSOE gana elecciones, pero no alcanza para formar Gobierno

La extrema derecha de Vox sube y se convierte en la tercera fuerza del Congreso tras una campaña contra los inmigrantes en España Pedro Sánchez se mantiene en el poder.

    MADRID

    El presidente y líder socialista español Pedro Sánchez ganó las elecciones legislativas celebradas ayer en España, las cuartas en cuatro años, con una mayoría menguante, y la extrema derecha de Vox se instaló como tercera fuerza en un Parlamento que augura un bloqueo político persistente.

    Al cierre de esta edición, el Partido Socialista (PSOE) de Sánchez es el vencedor, con 122 escaños y el 28.34% de los votos; mientras que Vox asciende al tercer puesto, con 53 legisladores y el 15.11% de los votos, escrutados el 83.93% de los sufragios.

    La segunda posición fue para el conservador Partido Popular (PP), con 85 escaños, de un total de 350 diputados que conforman el Congreso español.

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    Estos resultados no otorgan al bloque de derecha ni al de izquierda la mayoría absoluta para formar gobierno.

    El bloque de izquierda (PSOE, UP y Más País) lograría 159 diputados frente a los 148 del bloque de derecha (PP, Vox y C’s), frente a los 176 que se requieren para la mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados.

    El panorama amenaza con prolongar el bloqueo crónico que atenaza la política española desde 2015, cuando la irrupción de Podemos y Ciudadanos puso fin al tradicional bipartidismo PSOE/PP. Desde entonces ha habido cuatro elecciones legislativas, Gobiernos débiles y poca legislación en el Parlamento.

    Campaña contra inmigrantes

    La de ayer fue una repetición electoral consecutiva al fracaso de PSOE y Podemos de acordar, durante el verano, un Gobierno de coalición que habría sido el primero en estas cuatro décadas de democracia en España. “La única manera de frenar a la extrema derecha es con un Gobierno que tenga estabilidad parlamentaria suficiente”, argumentó el líder de Podemos, Pablo Iglesias, quien ofreció una alianza al PSOE.

    En tanto, una de las dominantes de la campaña fue Cataluña, donde sigue vivo el pulso del separatismo contra el Estado. La temperatura se disparó con la condena en octubre de nueve líderes independentistas a entre 9 y 13 años de cárcel, por su papel en el fracasado intento de secesión de 2017. La sentencia dio paso a una semana de disturbios en Cataluña, con una brutal represión policial que dejó un saldo de unos 600 heridos.

    El principal beneficiado de la crisis catalana fue Vox, partido que entró en el Parlamento en abril y cuyo líder, Santiago Abascal, propugna suspender la autonomía catalana. Abascal también basó su campaña en la expulsión de los inmigrantes ilegales de España, especialmente los menores no acompañados, vinculándolos con el aumento de la delincuencia en ese país.

    Triunfo independentista en Cataluña

    Los partidos independentistas catalanes revalidaron su presencia en el Parlamento español en las elecciones de ayer, con la entrada, por primera vez en el Congreso, de los secesionistas radicales de la CUP. La formación anticapitalista, que se presentaba por primera vez a unas elecciones a nivel nacional, ocupará dos escaños del Congreso español, con casi el 100% de los votos escrutados.

    El segundo partido más votado en esa región, la segunda más importante en número de votos por detrás de Andalucía (sur), fue el Partido Socialista Catalán (PSC, la rama catalana del PSOE español), con 12 escaños.

    La líder de la formación radical independentista CUP, Mireia Vehí, afirmó que su objetivo es “extender la rebeldía” en todo el Estado y presentar “una enmienda al régimen”. Vehí garantizó que los votos de su partido se traducirán “en clave destituyente”, dado que “serán ingobernables y contra el régimen”.