14/04/2024
05:04 PM

Un tribunal ruso prorroga la prisión preventiva al presunto espía estadounidense Paul Whelan

  • 23 agosto 2019 /

El ex infante de marina, que también tiene ciudadanía canadiense, británica e irlandesa, denunció que se le mantiene en prisión con el propósito de arrancarle una confesión.

Moscú, Rusia.

Un tribunal ruso prorrogó hoy hasta el 29 de octubre próximo la medida cautelar de prisión preventiva contra el estadounidense Paul Whelan, un antiguo infante de marina detenido en Moscú en diciembre de 2018 acusado de espionaje.

La decisión judicial fue adoptada por el tribunal del distrito de Lefórtovo a petición de la fiscalía.

'Malos vientos soplan desde el este. Soy inocente de toda las acusaciones, que son resultado de un secuestro político. No hubo ningún delito, no hay pruebas del delito', dijo Whelan en la vista, citado por la agencia Interfax.

El ex infante de marina, que también tiene ciudadanía canadiense, británica e irlandesa, denunció que se le mantiene en prisión con el propósito de arrancarle una confesión.

'Se me ha negado tratamiento de la lesiones que me causado el FSB (Servicio Federal de Seguridad, antiguo KGB) en la cárcel. Mis derechos han sido pisoteados', afirmó.

Lea: Uruguay disconforme con reelegir a Almagro en la OEA

La vista transcurrió a puerta cerrada y solo la parte resolutiva del dictamen fue leída en público.

Whelan fue detenido el 28 de diciembre del año pasado por agentes del FSB en un hotel de la capital rusa por presuntas 'actividades de espionaje' a favor de Estados Unidos, delito por el que puede ser condenado a hasta 20 años de cárcel.

El acusado recibió supuestamente de un conocido un lápiz de memoria que 'contenía la lista completa de los trabajadores de un servicio secreto' ruso.

Según su familia, Whelan viajó a Moscú para asistir a una boda. Su abogado, Vladímir Zherebenkov, mantiene que el estadounidense esperaba recibir materiales sobre viajes turísticos a Rusia en un dispositivo, como fotografías o videos y que no sabe de dónde salió la información secreta en el lápiz de memoria.

El detenido cree que cayó en una trampa y que su conocido actuó bajo órdenes del FSB, cuando le entregó información secreta. Texto y foto de EFE.