San José, Costa Rica
La Comisión Nacional de Emergencias de Costa Rica (CNE) informó este miércoles que el próximo 19 de agosto realizará un simulacro masivo de evacuación por terremoto, con el objetivo de mejorar las capacidades de respuesta.
Bajo el lema 'Costa Rica se prepara' las autoridades esperan que cerca de un millón de personas (20 por ciento de la población del país) que se encuentren en sus lugares de trabajo, hogar o en algún edificio evacúen hacia el punto de encuentro definido previamente.
'Este ejercicio permite fortalecer las capacidades de respuesta y le brinda herramientas a la población para que incorpore en su diario vivir acciones muy sencillas y en el momento de una emergencia real, sepa aplicar los conocimientos y poner a salvo su vida', afirmó el presidente de la CNE, Alexander Solís.
Costa Rica se ubica en una zona del mundo de alta actividad sísmica y anualmente registra cientos de temblores, aunque pocos son sentidos por la población.
Datos oficiales revelan que el país registra aproximadamente 350 sismos al mes (un total de 12 sismos al día), lo que lo hace propenso a una emergencia.
Según las autoridades, la actividad busca generar herramientas como la identificación de rutas de evacuación y sitios seguros de encuentro, para todas las personas, así como ser un ejercicio inclusivo donde se incluyan las personas en condición de discapacidad, los adultos mayores y hasta los animales de compañía.
El evento oficial espera la movilización de aproximadamente un millón de personas de diversos sectores público y privado. Además cuenta con la integración de Cámaras de Comercio, Construcción, Hoteleros, Turística, entre otras; así como la participación del sector comunal comprometidos en mejorar sus capacidades de respuesta.
La Comisión Nacional de Emergencias destacó que este es el primer simulacro nacional que se desarrolla en el país y espera promover la realización de los simulacros todos los años incorporando distintas amenazas, con el fin de fomentar la cultura preventiva en la población siguiendo el ejemplo de países como Colombia y Japón. EFE
