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12:27 PM

Caravana de migrantes hondureños se enfila hacia Huixtla

  • 23 octubre 2018 /

México permitió anoche la entrada a su territorio de cientos de personas que esperaban hacinados en el puente fronterizo con Guatemala.

Tapachula, México

La caravana de miles de hondureños que buscan llegar a Estados Unidos avanzó por el suroriental estado mexicano de Chiapas, en un brutal éxodo que se cobró al menos dos vida y en el que los migrantes denunciaron violaciones a derechos humanos por parte del Gobierno mexicano.

13
de octubre partió la caravana de migrantes de la ciudad de San Pedro Sula.

Ni el calor abrasador, por encima de los 30 grados, ni la dura caminata de unos 40 kilómetros del domingo han aplacado los ánimos de los miles de migrantes centroamericanos, en su gran mayoría hondureños, que han puesto rumbo a la localidad de Huixtla, en Chiapas.

A ritmo ligero, familias enteras, muchos hombres, pero también madres solteras con hijos, han convertido el asfalto en un río de personas, una muchedumbre agotada pero sin intenciones de desfallecer. De acuerdo con el refugio para migrantes del municipio de Suchiate, fronterizo con Guatemala, se registraron 7,125 personas de la caravana que entraron a territorio nacional, entre ellas, 1,500 mujeres y 2,400 niñas y niños.

Los más afortunados eran subidos en camiones y furgonetas gratuitamente, un regalo para los hondureños que arrancaron el periplo el 13 de octubre convocados por el boca-oreja o a través de las redes sociales.

No obstante, al menos un joven perdió la vida al caer de uno de estos vehículos, conforme se constató. Y según reportan medios locales, seis migrantes habrían muerto al volcar un tráiler en el que viajaban también en Chiapas, sin formar parte de la caravana, ejemplificando los peligros que enfrentan en la travesía.

Con banderas nacionales hondureñas y guatemaltecas, ellos van por Quezaltepeque, Chiquimula, Guatemala.

Algunos pedían limosna. Sin apenas nada en los bolsillos y escaso equipaje, viajan con lo puesto y agradecen la ayuda del pueblo mexicano, que les reparte agua, comida, medicamentos y ropa, en un ejemplo de enorme solidaridad.

La valentía, la ilusión por una vida mejor, se contagia entre los participantes de esta gran marcha.

10
días llevan de recorrido los hondureños que partieron en la caravana con rumbo a Estados Unidos.

“Estamos con todos los ánimos de seguir para arriba, para adelante, y en Estados Unidos esperamos a ver si nos dan el permiso para entrar”, comentó César Armando Rodríguez, un hondureño de 43 años que viaja con tres compañeros empujado por la pobreza de su país.

“¡No somos criminales!”, entonaban algunos durante la caminata rumbo a la pequeña localidad de Huixtla, a unos 35 kilómetros de su punto de partida de hoy en Tapachula.

Precisamente, este lunes varios colectivos sociales y la caravana migrante alzaron la voz contra las autoridades, con quienes el viernes mantuvieron un duro choque al forzar su entrada a territorio mexicano.

El primer grupo continúa adentrándose en el estado de Chiapas.