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Foros internacionales examinan crisis de Nicaragua, tras sangriento fin de semana

  • 16 julio 2018 /

Carlos Trujillo, embajador estadounidense ante la OEA, adelantó que el tema de Nicaragua volvería esta semana a la agenda del foro continental.

Managua, Nicaragua

Tras un sangriento fin de semana que dejó 12 muertos en Nicaragua, la comunidad internacional comenzó a debatir este lunes la situación en ese país y la represión contra las protestas que desde hace tres meses exigen la salida del poder del presidente izquierdista Daniel Ortega.

En tanto, cientos de estudiantes marcharon este lunes en la capital para exigir justicia por los 280 personas que han muerto a manos de las fuerzas del gobierno.

'El gobierno ha impuesto una política de terror, pero llegaremos hasta el final por los muertos. Ortega no puede seguir gobernando', dijo a la AFP Axel Munguía, un estudiante de 20 años durante la protesta en Managua. 'La lucha está en las calles, no vamos a regresar a clases mientras este hombre terrorista, genocida siga en el poder', afirmó Juliana Munguía, estudiante de psicología.

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Desafían la represión

El sábado, 200 estudiantes lograron salir de un asedio de 20 horas de fuerzas gubernamentales en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN) de Managua, y un templo vecino, en una acción que dejó dos estudiantes muertos: Gerald y Francisco.

El domingo, policías y paramilitares también arremetieron contra Masaya (sur) y comunidades vecinas para remover los bloqueos de carreteras de los manifestantes antigubernamentales, una operación que dejó 10 muertos, según la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).

La vicepresidenta y primera dama Rosario Murillo aseguró este lunes que el gobierno actúa para liberar el territorio de los bloqueos de carreteras y para 'restaurar la paz'.

Aseguró que las protestas responden a 'un plan terrorista y golpista acompañada por una infame y falsa campaña mediática nacional e internacional. Ese golpe que quiso imponer esa minoría llena de odio, esa minoría siniestra, maligna, pero no lo lograron ni lo lograrán'.

Los reclamos inicialmente eran contra una reforma del sistema de pensiones que el gobierno dejó sin efecto, pero derivaron en una demanda para la salida del poder de Ortega, quien gobierna desde 2007 por tercer período consecutivo.

La oposición lo acusa de instaurar una dictadura y pide anticipar a marzo próximo las elecciones presidenciales de 2021.

Ese mismo día, paramilitares dispararon contra un vehículo en el que se desplazaba el obispo Abelardo Mata, uno de los cinco jerarcas católicos que median en el diálogo entre el gobierno y la oposición.

Agenda internacional

Hundida en la violencia y sin salidas a la vista, la crisis de Nicaragua será discutida en foros internacionales como la reunión de cancilleres de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac), que se inició este lunes en Bruselas.

Este lunes, Francia condenó los ataques perpetrados en los últimos días por las fuerzas de la policía y paramilitares contra responsables religiosos y manifestantes nicaragüenses y abogó por la reanudación del diálogo con la oposición.

A su vez, el embajador estadounidense ante la OEA, Carlos Trujillo, adelantó que el tema de Nicaragua volvería esta semana a la agenda del foro continental.

'La violenta represión del gobierno a través del uso de maras (turbas) sandinistas es inaceptable. Estados Unidos sentará responsabilidad de los violadores de derechos humanos', comentó Trujillo en Twitter.

En tanto, el presidente costarricense Carlos Alvarado adelantó que la crisis en Nicaragua estará presente en sus discusiones con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, con quien se reunirá este lunes en San José.

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Iglesia atacada

El recrudecimiento de la violencia se ha dado en medio de una ofensiva que las fuerzas del gobierno emprendieron desde los primeros días de julio para 'limpiar' las calles de barricadas, levantadas por los manifestantes como parte de las protestas iniciadas el 18 de abril.

La Iglesia católica, como mediadora, ha sufrido los embates del repunte de la violencia, como lo reflejó el ataque al obispo Báez.

El cardenal Leopoldo Brenes denunció que las fuerzas gubernamentales entraron y robaron en la casa cural de Catarina y pidió al gobierno 'respetar los templos' y detener los ataques contra la población.

Los jerarcas católicos denuncian la 'falta de voluntad política del gobierno' de dialogar con la opositora Alianza Cívica.