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Duelo de izquierdas en las primarias francesas

  • 23 enero 2017 /

Fragmentado, el oficialismo parece incapaz de impedir el ascenso de la derecha

París, Francia

Benoît Hamon, un socialista con un programa innovador, disputará la nominación presidencial del Partido Socialista (PS) francés al ex primer ministro Manuel Valls, representante de la izquierda de gobierno, fracturada tras el impopular mandato de François Hollande.

Valls, quien hasta hace poco más de un mes era la mano derecha de Hollande, fue superado en cinco puntos en la primera vuelta de las primarias de la izquierda el domingo por Hamon, un representante del ala crítica del partido.

La segunda vuelta de estas primarias, que se celebrará el 29 de enero, a menos de tres meses de las elecciones presidenciales, se anuncia como un choque entre dos caras del socialismo francés, un partido profundamente dividido entre una línea 'utopista' y una 'hiperrealista'.

Foto: La Prensa

Para Hamon, su paso en cabeza a la segunda vuelta de las primarias contra todo pronóstico muestra claramente la voluntad de los electores de 'cerrar un capítulo' tras el quinquenio de Hollande.

El actual presidente, hundido en los sondeos, renunció a presentarse a un segundo mandato, consciente de los riesgos que su candidatura supondría para la izquierda, lo que dejó vía libre a Valls, a quien muchos consideran como su heredero.

No obstante, según los sondeos, ni Hamon ni Valls pasarían el 23 de abril a la segunda vuelta de los comicios presidenciales.

Ambos se ubicarían en quinta posición, con menos de 10% de los votos, muy por detrás de la líder de la ultraderecha Marine Le Pen, y del conservador François Fillon, que se disputarían la presidencia en la votación del 7 de mayo.

Foto: La Prensa

Hamon, el otro candidato fuerte de la izquierda tiene pocas posibilidades ante los candidatos de derecha, indican los analistas.
La primera ronda de las primarias, con siete candidatos en liza, movilizó a un poco más de 1,5 millones de votantes, muy por debajo de los cuatro millones de electores que designaron a Fillon como el candidato de la derecha.

Los electores se dicen decepcionados con la política del gobierno, que consideran contraria a los valores de la izquierda, sobre todo tras la adopción de leyes para liberalizar la economía y el mercado laboral.