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La decisión del piloto que pudo haber evitado la tragedia de Chapecoense

  • 30 noviembre 2016 /

Alfredo Bocanegra, director de Aeronáutica Civil de Colombia cuestionó la supuesta negligencia del piloto boliviano.

Bogotá, Colombia.

Nuevos detalles han salido a la luz sobre el piloto Miguel Quiroga, capitán de la tripulación del vuelo Lamia 2933 que llevaba a bordo a la plantilla del club brasileño Chapecoense, y que se estrelló en Colombia, ocasionando la muerte de 71 personas.

Pese a que Quiroga fue considerado un héroe, tras la conclusión de varios medios de que decidió sobrevolar hasta quedarse sin combustible para evitar una explosión de la aeronave al momento del impacto, el director de Aeronáutica Civil de Colombia, Alfredo Bocanegra, tiene una versión distinta y hoy arremetió en críticas contra el piloto boliviano.

Bocanegra manifestó sus dudas respecto al cumplimiento estricto de las reglas aéras por parte de la empresa LAMIA e indicó que era probable que el piloto no declaró emergencia por las consecuencias económicas que pudiera afrontar. 'El lenguaje técnico en aviación es muy preciso, se mide en segundos. Efectivamente, si hay solicitud de 'prioridad', que no es lo mismo que 'emergencia'', aclaró Bocanegra al confirmar que el piloto no declaró el peligro que afrontaba con claridad.

'¡No se comprende cómo si estaba sin combustible no se declaró en emergencia!', se indignó el experto en aviación y añadió: 'Siempre se indica que si hay simultaneidad se busque un aeropuerto alterno, pero si hubiera declarado la emergencia bajaban inmediatamente los de LAMIA'.

Miguel Quiroga era el capitán de la aeronave de Lamia que se estrelló en Colombia con la plantilla del equipo Chapecoense a bordo.

Quiroga no se declaró en emergencia, según reportó el director de Aeronáutica Civil de Colombia, Alfredo Bocanegra.
En caso de que buscara un aeropuerto alternativo, Bocanegra explicó que los aviones suelen tener combustible extra para que le permita arribar a la otra estación. 'Debería llevar el combustible suficiente, un 10 por ciento más y otro diez por ciento que le permita llegar a aeropuertos alternos… se nota que no lo tenían', indicó.

'Es muy doloroso que no haya declarado la emergencia por problemas personales que tuviera que afrontar después', manifestó Bocanegra. 'Las compañías son responsables por las calamidades, tienen que acompañar el rescate. El compromiso de la aerolínea debe estar asegurada y reasegurada, de manera que esperamos que tengan esto todo organizado', agregó el funcionario aeronático.

En caso de que buscara un aeropuerto alternativo, Bocanegra explicó que los aviones suelen tener combustible extra para que le permita arribar a la otra estación. 'Debería llevar el combustible suficiente, un 10 por ciento más y otro diez por ciento que le permita llegar a aeropuertos alternos… se nota que no lo tenían', indicó.

'El avión debería reabastecerse en Bogotá', pero siguió su curso hacia Medellín, afirmó Gustavo Vargas, representante de la compañía aérea al diario Página Siete.

Su padre también murió en accidente aéreo

Según medios internacionales, el padre de Quiroga, de 54 años, que piloteaba el siniestrado avión, también murió en un accidente aéreo, en 1963, a los 53 años de edad.

Orlando Quiroga murió en un accidente en Caranavi cuando 'Micky' era tan sólo un niño de un año de edad. Paradójicamente, su gran amor por el fútbol hizo que le dedicaran un estadio en la pequeña boliviana que lleva su nombre - el Estadio Olímpico Orlando Quiroga.



Micky creció deseoso de seguir los pasos de su padre a pesar de no conocerlo. En una entrevista el año pasado, dijo: 'Después de eso (la muerte de su padre), mi madre, Ilse Menacho, regresó a Cochabamba y años más tarde se casó con otro piloto, Abraham Prada, que trabajó en Lloyd Aéreo Boliviano y luego fundó su propia empresa de aviones de carga'.

'Hemos crecido entre aeronaves. Mi hermano mayor, Edgar, es un piloto, vuela en Amazonas. Yo soy un piloto, mi sobrino es un piloto, mi hijo, también - somos una familia de pilotos', relató Quiroga.