Caracas, Venezuela.
La oposición venezolana dio ayer un ultimátum al gobierno de Nicolás Maduro durante una multitudinaria protesta, en la que anunció que declarará al presidente “en abandono del cargo” y convocó a una huelga general.
Al final de la marcha -que activistas estimaron en 1,2 millones de manifestantes-, los principales dirigentes de la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) anunciaron su ofensiva para lograr la destitución de Maduro, tras la suspensión del referendo revocatorio.
Desde la tribuna, el presidente de la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, Henry Ramos Allup, anunció que Maduro será declarado en “abandono del cargo” por el parlamento, lo que le será “notificado” en una manifestación hacia el palacio presidencial de Miraflores el 3 de noviembre. “Hemos comenzado un proceso para declarar la responsabilidad política de ese vago que tenemos en Miraflores”, dijo Ramos Allup, al explicar que la figura del “abandono del cargo” está contemplada en la Constitución cuando el presidente deja de cumplir sus deberes. El secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, llamó a una huelga general de 12 horas para mañana.
El también líder opositor Henrique Capriles exigió a Maduro “ordenar” al poder electoral reactivar el proceso del revocatorio. “Le estamos dando un plazo al gobierno. Yo le digo al cobarde que está en Miraflores... que el 3 de noviembre todo el
pueblo venezolano se viene para Caracas porque vamos pa ‘Miraflores”, advirtió Capriles.
En Caracas la movilización transcurrió sin incidentes, pero en ciudades de siete estados, especialmente Nueva Esparta y Sucre, se registraron escaramuzas. Al menos 80 detenidos y 20 heridos (cuatro de bala) dejaron las marchas opositoras, denunció Alfredo Romero, director de la onegé Foro Penal.
Oficialismo
El presidente Nicolás Maduro encabezó una reunión del Consejo de Defensa de la Nación (Codena), órgano integrado por todos los poderes del Estado, y saludó una concentración que se dirigió hasta el Palacio de Miraflores para respaldarlo.
Maduro llamó a los trabajadores y empresarios del país a desatender el llamado a paro del antichavismo, algo que, señaló, busca desestabilizar y la materializar un golpe de Estado. “Llamo al trabajo y con el trabajo a derrotar aquellos que quieren hacerle daño a nuestra patria, que quieren llenarnos de violencia y llevar a la patria a una desestabilización”, sostuvo y reiteró su tesis de que el mandatario de EUA, Barack Obama, ha “ordenado” a sus detractores desestabilizar el país. “Obama se va y quiere destruir a Venezuela antes de irse”, dijo.
La oposición venezolana dio ayer un ultimátum al gobierno de Nicolás Maduro durante una multitudinaria protesta, en la que anunció que declarará al presidente “en abandono del cargo” y convocó a una huelga general.
Al final de la marcha -que activistas estimaron en 1,2 millones de manifestantes-, los principales dirigentes de la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) anunciaron su ofensiva para lograr la destitución de Maduro, tras la suspensión del referendo revocatorio.
Desde la tribuna, el presidente de la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, Henry Ramos Allup, anunció que Maduro será declarado en “abandono del cargo” por el parlamento, lo que le será “notificado” en una manifestación hacia el palacio presidencial de Miraflores el 3 de noviembre. “Hemos comenzado un proceso para declarar la responsabilidad política de ese vago que tenemos en Miraflores”, dijo Ramos Allup, al explicar que la figura del “abandono del cargo” está contemplada en la Constitución cuando el presidente deja de cumplir sus deberes. El secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, llamó a una huelga general de 12 horas para mañana.
Los venezolanos salieron para demostrar su descontenco contra el gobierno de Maduro.
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En Caracas la movilización transcurrió sin incidentes, pero en ciudades de siete estados, especialmente Nueva Esparta y Sucre, se registraron escaramuzas. Al menos 80 detenidos y 20 heridos (cuatro de bala) dejaron las marchas opositoras, denunció Alfredo Romero, director de la onegé Foro Penal.
El líder opositor Henrique Capriles en la Toma de Venezuela. Fotos: AFP
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El presidente Nicolás Maduro encabezó una reunión del Consejo de Defensa de la Nación (Codena), órgano integrado por todos los poderes del Estado, y saludó una concentración que se dirigió hasta el Palacio de Miraflores para respaldarlo.
Maduro llamó a los trabajadores y empresarios del país a desatender el llamado a paro del antichavismo, algo que, señaló, busca desestabilizar y la materializar un golpe de Estado. “Llamo al trabajo y con el trabajo a derrotar aquellos que quieren hacerle daño a nuestra patria, que quieren llenarnos de violencia y llevar a la patria a una desestabilización”, sostuvo y reiteró su tesis de que el mandatario de EUA, Barack Obama, ha “ordenado” a sus detractores desestabilizar el país. “Obama se va y quiere destruir a Venezuela antes de irse”, dijo.
El presidente venezolano también presidió una concentración en Caracas. Foto: AFP
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