10 cosas que ellas odian de ellos al vestir

No se necesita dinero para agradarlas, e l buen gusto y la limpieza muchas veces hacen la diferencia.

  • 27 ago 2015

San Pedro Sula, Honduras

Por lo general son las mujeres las que tienen mejores costumbres y cuidados a la hora de vestir y por ello siempre quieren a su lado a un hombre que les de la talla.

Estos son algunos errores que se cometen con bastante frecuencia:

1

CALCETINES BLANCOS

Si tu mamá ha hecho hasta lo imposible por vestirte con calcetines blancos desde pequeño y en cualquier ocasión, la madurez es el momento preciso para dejar de lado esa moda que más bien parece copiada de Michael Jackson.
Los calcetines blancos no deben arruinar el look de un hombre vestido de traje y corbata y que al sentarse deja ver que sigue siendo el bebé consentido de mamá. Los calcetines siempre deben comprarse en tonos oscuros y combinarse según el color del pantalón. Los blancos y de toalla sólo deberían usarse para hacer actividad física.
2

MOSTRAR LA ROPA INTERIOR

Ya no más por favor. La tendencia ya pasó de moda y la ropa interior, aunque con marquilla y letras enormes parece que deben salir a la luz, la verdad es que es momento de devolverla a donde debe estar: en el interior. A nadie, y menos a ellas, le interesa saber de qué marca son los boxers.

3

¡SIN CINTURÓN NO!

Y mucho menos si el pantalón queda un poquito grande y la comodidad queda a un lado para subirse, una y otra vez la prenda debido a la falta del cinturón. Además de parecer una manía le hace considerar a ellas si el hombre no tiene los recursos para comprar la 'faja' adecuada. Es un accesorio que nunca debe ser dejado de lado, ya sea que se trate de pantalones largos o cortos.

4

esa es mi marca

No, no y no. Otro error que debe quedar en el pasado es que los logotipos y nombres exageradamente grandes deben persistir en el vestuario de un hombre. El logo del caballito es para los que juegan polo y la copia ya no es novedad. Además ellas ya no quieren al niño caprichoso que necesita decirle al mundo de dónde o de qué marca se viste.

5

chancletas hasta en la boda

Este tipo de calzado fue ideado para la playa o para la ducha. Caminar por el mall o irse de paseo con ellas ya no funciona, aunque sea pleno verano. Bermudas y chancletas no son chic para un hombre que se preocupa por su apariencia. Por favor... tampoco se usan con medias. Mocasines de cuero más delgado o de gamuza, o zapatillas de vestir confeccionadas en tela liviana pueden ser ouna alternativa.

6

loción, no es un lujo

Así como la comida entra por los ojos, los hombres ganan puntos al oler bien. Por eso es indispensable una buena loción, o al menos un desodorante con alguna fragancia que vaya con su personalidad. Ojo, la loción o el desodorante no deben sustituir una buena ducha. La limpieza personal diaria es primordial.

7

corbata con elegancia

Ya sea una corbata convencional o skinny (más angostas que las tradicionales), éstas siempre deben terminar justo encima de la hebilla del cinturón: ni antes, ni después. Mucho cuidado con los colores, los dibujitos o las letras ya que pueden arruinar el look perfecto y hacerlo quedar como el payaso del momento.

8

informal hasta en el funeral

Los jeans son los reyes del guardarropa por excelnecia, pero hay que usarlo en el momento adecuado. No siempre deben estar presentes, probar con telas livianas en climas calientes y otros materiales en zonas más frías pueden impulsar stu imagen y no ser la fotografía de siempre. Las camisas, polos y demás siguen la misma tendencia.

9

ropa deportiva...es solo para el deporte

Vestir esa ropa para una salida o para ir a trabajar da un look demasiado informal. Ellas odian cuando no pueden entrar a la disco porque llevas los tenis del gimnasio o la gorra que se ve muy bien en el día soleado, pero no en la noche. Y la camiseta del equipo? Déjala para el estadio o para el momento informal con tus amigos.

10

esos pelitos mal ubicados

Así como el corte de pelo dice mucho al igual que la barba, el cuidado del vello en oídos, nariz, cejas y otros lugares menos públicos pueden hacer la diferencia entre el príncipe azul y el sapo feo de la película. La revisión diaria es necesaria y un arreglo de vez en cuando no le hace mal a nadie. Las uñas de manos y pies siguen la misma tendencia y por favor no se las coma.