ROMA. Vestidos con mezcla de estampado múltiple y animal, al mismo tiempo, abrigos de cuadros negros y morados y minifaldas de tablas de colegiala en morado, amarillo, verde y azul, predominan en la colección invernal de Versace.
La diseñadora Donatella Versace propone una extraordinaria explosión de colores y una mezcla de tejidos, con los que jugó sin límites y demostró que en este mundo todo vale.
Presentó vestidos realizados con camisas en tejidos de lana unidos a faldas de cuero, o chaquetas de “motero” con una parte en piel y otra en punto.
Esta colección invernal 2018/2019 debutó en la Semana de la Moda femenina de Milán, donde Versace también dejó claro que la moda es para todo el mundo. Durante el mismo presentó a una decena de modelos con el cabello cubierto con velos también de colores y estampados diversos.
Como complementos, utilizó maxipendientes de borlas y collares grandes dorados, así como pequeños bolsos bandolera, de asa plateada.
Los abrigos de pelo y estampado de rombos en verde y negro se lucieron cerrados, sin permitir ver las camisas interiores, pero sí faldas de cuadros rojos y azules. Cada una de las prendas es una invitación para ser más atrevida a la hora de salir a la calle. Se pueden usar para oficina como para salidas semiformales.
La diseñadora Donatella Versace propone una extraordinaria explosión de colores y una mezcla de tejidos, con los que jugó sin límites y demostró que en este mundo todo vale.
Presentó vestidos realizados con camisas en tejidos de lana unidos a faldas de cuero, o chaquetas de “motero” con una parte en piel y otra en punto.
Esta colección invernal 2018/2019 debutó en la Semana de la Moda femenina de Milán, donde Versace también dejó claro que la moda es para todo el mundo. Durante el mismo presentó a una decena de modelos con el cabello cubierto con velos también de colores y estampados diversos.
Como complementos, utilizó maxipendientes de borlas y collares grandes dorados, así como pequeños bolsos bandolera, de asa plateada.
Los abrigos de pelo y estampado de rombos en verde y negro se lucieron cerrados, sin permitir ver las camisas interiores, pero sí faldas de cuadros rojos y azules. Cada una de las prendas es una invitación para ser más atrevida a la hora de salir a la calle. Se pueden usar para oficina como para salidas semiformales.
 Los pañuelos, collares dorados y maxipendientes de borlas captaron la atención. Fotos AFP
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