California, Estados Unidos
La diseñadora Donatella Versace deslumbra con una colección en la que utiliza una extraordinaria explosión de colores y una mezcla de tejidos, con los que juega sin límites y demuestra que en este mundo todo vale.
Así, presenta vestidos realizados con camisas en tejidos de lana unidos a faldas de cuero, o chaquetas de “motero” con una parte en piel y otra en punto. Los abrigos de pelo y estampado de rombos en verde y negro se lucen cerrados, sin permitir ver las camisas interiores, pero sí faldas de cuadros rojos y azules.
Los vestidos con mezcla de estampado múltiple y animal, al mismo tiempo, se alternan con abrigos de cuadros negros y morados y minifaldas de tablas de colegiala en morado, amarillo, verde y azul.
 Versace dejó claro que la moda es para todo el mundo. Presentó modelos con el cabello cubierto con velos.
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