Violador serial y uno de los delincuentes más buscados del mundo, el 'doctor horror' finalmente cayó esta semana en Paraguay, a la hora de la siesta, en un barrio de Asunción. Codenado en Brasil, su país, a 278 años de cárcel por abusar sexualmente de más de 30 mujeres, el médico Roger Abdelmassih (70), fue detenido en la calle, tras permancer prófugo y con identidades falsas durante tres años.
Su detención no fue casual. Fue parte de un operativo conjunto entre las autoridades paraguayas y la policía brasileña, según publica El Clarín de Argentina.
Abdelmassih, brasileño de origen libanés, es médico de profesión y pionero en la inseminación in vitro de su país. De hecho, era dueño de la clínica de fertilización más grande en Brasil. Incluso era conocido como el 'médico de las estrellas'. Y era justamente en su clínica especializada en reproducción asistida donde cometía los abusos.
Estos hechos habrían sucedido entre 1995 y 2008, en la clínica ubicada en un barrio de San Pablo.
Con 52 acusaciones de abuso sexual a pacientes y 4 tentativas, todas mujeres que se atendían en su clínica, Abdelmassih cayó preso por cuatro meses en 2009, sin embrago quedó en libertad por determinación del Supremo Tribunal Federal, que le concedió el habeas corpus.
Condenable
En el 2011 el Supremo Tribunal Federal reformuló la decisión por lo que el médico fue considerado prófugo de la justicia. A partir de allí, Abdelmassih encaró una vida en la clandestinidad, pero con lujo.
Según el relato de medios paraguayos y brasileños, como la revista Veja, el médico vivió en varios países de Europa antes de llegar a Paraguay hace 3 meses, donde vivía en una lujosa residencia en el barrio de San Cristobal, junto a su esposa, Larissa Maria Sacco, una ex fiscal brasileña, con quien tuvo dos niños.
Un foro muy popular en San Pablo recopiló el testimonio de unas 39 víctimas de diferentes lugares del país, como San Pablo, Minas Gerais, Paraná, Río Grande Do Norte, Piauí y Río de Janeiro, en 194 páginas que lo condenaron.
La mayoría de las víctimas coinciden en que el abuso se dio en la sala de consulta y de recuperación de la clínica, especialmente después de la 'colecta de óvulos'.
En muchos de los casos las pacientes aún se encontraban bajo los efectos de algún sedante.
Las mujeres relatan que ni bien despertaban encontraban al médico tocando sus partes íntimas, sus senos y muchas de ellas fueron forzadas a mantener relaciones sexuales.
