Nueva York, Estados Unidos.
“El cocinero es un artista, es un individuo que trabaja todos los sentidos: el gusto, el olfato, la vista, el tacto y hasta el oído” dij Guillermo Rodríguez. Sencillo ha de resultar complacer un antojito catracho para una persona que se encuentra en Estados Unidos y España, países que por la gran cantidad de hondureños migrantes ofrece esa oportunidad de degustar un crujiente pastelito, unos humeantes frijolitos fritos, unos sabrosos tamalitos o un tapado olanchano entre otras delicias de la de gastronomía catracha, otros países no le permitirán disfrutar ese lujo a menos que haga maletas y viaje a Finlandia donde puede visitar el restaurante La GuacaMaya.
“La idea de abrir un restaurante aquí en Finlandia la tengo hace mucho tiempo, pero hasta ahora decidí hacerlo y me siento muy orgullosa de mostrar en este país donde se sabe poco o nada de Honduras la riqueza de nuestra cultura y gastronomía. Junto con mi familia nos dimos la tarea de mostrarles lo nuestro, deseo que ellos sepan que no todo lo que sale de allá es malo, que no somos violentos y que tenemos muchas cosas lindas que ofrecerles”, inició diciendo su propietaria Patricia Rivera.
La GuacaMaya, además de ser un restaurante que ofrece a su comensales una serie de exquisitos platillos nacionales representa un tributo a la rica cultura hondureña, en sus paredes está plasmada en pinturas la belleza de Roatán, la cultura Maya, el sabor y tradición de cada una de las etnias, elementos que han sido del agrado de los nórdicos quiénes representan la mayor parte de la clientela en el novedoso restaurante.
¿Qué tipo de comidas se puede encontrar en La GuacaMaya?
Tenemos muchas cosas que ofrecerles si algún día deciden visitarnos y entre ellas tenemos: un fundido de frijoles con queso un típico muy nuestro, hacemos muchas fusiones utilizando plátanos, aguacates, tortillas hechas a mano, en ocasión de la fiesta de independencia vamos a ofrecer a nuestros clientes tamalitos de frijoles y los famosos pastelitos de perro para que ellos los conozcan.
“Debido a que el negocio abrió recientemente aun no contamos con muchos productos que se venden en Honduras, sin embargo vamos a traer todo tipo de mercadería, en especial café hondureño algo que va gustar mucho debido a su gran calidad”, señaló esta bióloga convertida a chef.
¿Qué tal ha recibido la comunidad finlandesa este nuevo estilo de cocina?
La gente está encantada ya que es algo diferente, aquí se encuentran restaurantes hispanos sobre todo mexicanos, pero nuestro sabor es diferente, tratamos de mantener lo que aprendimos en Honduras con sus especias, cilantro, comino y todos nuestros ingredientes y a la gente le ha agradado.
¿No le pareció una idea descabellada abrir un restaurante hondureño en Finlandia?
No es fácil pensar en hacer algo como esto, principalmente en países nórdicos como este donde la gente no conoce nada de Centroamérica a excepción de Costa Rica, pero yo me dije un día: “Mira Patricia si tú no te atreves nunca vas a saber si va gustar o no”, lo termine haciendo y aquí estoy. Ellos comen muchísimo salmón entonces yo les vendo uno con sabor criollo y lo acompaño con tajaditas de plátano y les ha encantado.
En el futuro queremos darle más variedad a nuestra carta, queremos innovar poco a poco, queremos que ellos se familiaricen con nuestros platillos e iremos añadiendo comidas como el tapado costeño y olanchano, muero por venderles sopa de caracol pero estoy viendo cómo puedo importarlo.
¿Puede un hondureño viajar a Finlandia y despreocuparse por encontrar un buen plato catracho?
Les invito a venir a La GuacaMaya ya que la comida finlandesa es bien insípida, creo que han de haber muy pocos hondureños en este país que es tan grande en territorio pero con tan pocos habitantes, sin embargo tenemos clientes de Chile, Ecuador, Colombia y de muchos países latinoamericanos, hasta el día de hoy solo hemos tenido un cliente de Honduras y me manifestó que estaba encantado y al saber que era mi paisano más feliz estaba de poder servirle, nos ha visitado unas 4 veces con su familia y compañeros de trabajo.
La GuacaMaya es un negocio familiar, ubicado en Vantaa la cuarta ciudad más grande de Finlandia y ubicada muy cerca de Helsinski en el que su propietaria Patricia Rivera desempeña su labor de la mano de sus dos hijas y yernos quienes se ocupan de preparar los platillos ya tender a su creciente clientela.
Además de degustar ricos platillos el pueblo finlandés tiene la oportunidad de disfrutar con sus propios ojos la belleza de Honduras ya que en la decoración de este negocio predominan pinturas de las principales ciudades, monumentos, iglesias además de videos que muestran los paisajes más hermosos de la geografía nacional, documentales preciosos de sus ciudades y a eso le agregan la música de Guillermo Anderson y Polache.
“Mi función en este país es ser una embajadora de la cultura de mi país y quiero que el mundo sepa que vengo de una nación hermosa, donde predomina la gente buena y trabajadora, en Honduras los malos son contados y ese es mi mensaje para un pueblo finlandés que nos ha tratado muy bien”, Concluyó la propietaria del restaurante La GuacaMaya, Patricia Rivera.
“El cocinero es un artista, es un individuo que trabaja todos los sentidos: el gusto, el olfato, la vista, el tacto y hasta el oído” dij Guillermo Rodríguez. Sencillo ha de resultar complacer un antojito catracho para una persona que se encuentra en Estados Unidos y España, países que por la gran cantidad de hondureños migrantes ofrece esa oportunidad de degustar un crujiente pastelito, unos humeantes frijolitos fritos, unos sabrosos tamalitos o un tapado olanchano entre otras delicias de la de gastronomía catracha, otros países no le permitirán disfrutar ese lujo a menos que haga maletas y viaje a Finlandia donde puede visitar el restaurante La GuacaMaya.
“La idea de abrir un restaurante aquí en Finlandia la tengo hace mucho tiempo, pero hasta ahora decidí hacerlo y me siento muy orgullosa de mostrar en este país donde se sabe poco o nada de Honduras la riqueza de nuestra cultura y gastronomía. Junto con mi familia nos dimos la tarea de mostrarles lo nuestro, deseo que ellos sepan que no todo lo que sale de allá es malo, que no somos violentos y que tenemos muchas cosas lindas que ofrecerles”, inició diciendo su propietaria Patricia Rivera.
La GuacaMaya, además de ser un restaurante que ofrece a su comensales una serie de exquisitos platillos nacionales representa un tributo a la rica cultura hondureña, en sus paredes está plasmada en pinturas la belleza de Roatán, la cultura Maya, el sabor y tradición de cada una de las etnias, elementos que han sido del agrado de los nórdicos quiénes representan la mayor parte de la clientela en el novedoso restaurante.
¿Qué tipo de comidas se puede encontrar en La GuacaMaya?
Tenemos muchas cosas que ofrecerles si algún día deciden visitarnos y entre ellas tenemos: un fundido de frijoles con queso un típico muy nuestro, hacemos muchas fusiones utilizando plátanos, aguacates, tortillas hechas a mano, en ocasión de la fiesta de independencia vamos a ofrecer a nuestros clientes tamalitos de frijoles y los famosos pastelitos de perro para que ellos los conozcan.
“Debido a que el negocio abrió recientemente aun no contamos con muchos productos que se venden en Honduras, sin embargo vamos a traer todo tipo de mercadería, en especial café hondureño algo que va gustar mucho debido a su gran calidad”, señaló esta bióloga convertida a chef.
¿Qué tal ha recibido la comunidad finlandesa este nuevo estilo de cocina?
La gente está encantada ya que es algo diferente, aquí se encuentran restaurantes hispanos sobre todo mexicanos, pero nuestro sabor es diferente, tratamos de mantener lo que aprendimos en Honduras con sus especias, cilantro, comino y todos nuestros ingredientes y a la gente le ha agradado.
¿No le pareció una idea descabellada abrir un restaurante hondureño en Finlandia?
No es fácil pensar en hacer algo como esto, principalmente en países nórdicos como este donde la gente no conoce nada de Centroamérica a excepción de Costa Rica, pero yo me dije un día: “Mira Patricia si tú no te atreves nunca vas a saber si va gustar o no”, lo termine haciendo y aquí estoy. Ellos comen muchísimo salmón entonces yo les vendo uno con sabor criollo y lo acompaño con tajaditas de plátano y les ha encantado.
En el futuro queremos darle más variedad a nuestra carta, queremos innovar poco a poco, queremos que ellos se familiaricen con nuestros platillos e iremos añadiendo comidas como el tapado costeño y olanchano, muero por venderles sopa de caracol pero estoy viendo cómo puedo importarlo.
¿Puede un hondureño viajar a Finlandia y despreocuparse por encontrar un buen plato catracho?
Les invito a venir a La GuacaMaya ya que la comida finlandesa es bien insípida, creo que han de haber muy pocos hondureños en este país que es tan grande en territorio pero con tan pocos habitantes, sin embargo tenemos clientes de Chile, Ecuador, Colombia y de muchos países latinoamericanos, hasta el día de hoy solo hemos tenido un cliente de Honduras y me manifestó que estaba encantado y al saber que era mi paisano más feliz estaba de poder servirle, nos ha visitado unas 4 veces con su familia y compañeros de trabajo.
La GuacaMaya es un negocio familiar, ubicado en Vantaa la cuarta ciudad más grande de Finlandia y ubicada muy cerca de Helsinski en el que su propietaria Patricia Rivera desempeña su labor de la mano de sus dos hijas y yernos quienes se ocupan de preparar los platillos ya tender a su creciente clientela.
Además de degustar ricos platillos el pueblo finlandés tiene la oportunidad de disfrutar con sus propios ojos la belleza de Honduras ya que en la decoración de este negocio predominan pinturas de las principales ciudades, monumentos, iglesias además de videos que muestran los paisajes más hermosos de la geografía nacional, documentales preciosos de sus ciudades y a eso le agregan la música de Guillermo Anderson y Polache.
“Mi función en este país es ser una embajadora de la cultura de mi país y quiero que el mundo sepa que vengo de una nación hermosa, donde predomina la gente buena y trabajadora, en Honduras los malos son contados y ese es mi mensaje para un pueblo finlandés que nos ha tratado muy bien”, Concluyó la propietaria del restaurante La GuacaMaya, Patricia Rivera.
