28/03/2024
05:18 PM

En promedio, EUA deporta un hondureño cada 15 minutos

En lo que va de 2013, las autoridades migratorias de Estados Unidos ya han “regresado” a 16,960.

Un sueño construido por años, un viaje por tierras extrañas, un camino que puede durar meses, y un destino, del que varios llegan a estar solo a unos pasos, puede terminar en tan solo unos segundos.

“Solo crucé a Estados Unidos y me agarraron. Mi hermano pagó tres mil dólares. Ya había cruzado la frontera, pero al solo entrar me agarró la gente de Migración”, dijo visiblemente decepcionada Maritza Vásquez, oriunda de Santa Bárbara, quien tardó un mes con 18 días en llegar a suelo norteamericano.

Esta es la historia casi calcada que cuentan miles y miles de hondureños que son “arrancados” del sueño estadounidense y enviados de vuelta a encarar la realidad de la que trataron de huir cuando iniciaron su atrevido escape en busca del “sueño americano”.Ayer, 261 compatriotas más llegaron deportados en avión a San Pedro Sula, 132 por la mañana y 129 por la tarde.

Esto sucede casi a diario. En los primeros 165 días del año 2013, o sea, hasta el pasado 14 de junio, las autoridades de Migración de Estados Unidos han regresado a 16,960 compatriotas en avión a Honduras.

Esto significa que en promedio llegan 3,084 deportados al mes, 103 al día, cuatro por hora o lo que es su equivalente: cada 15 minutos regresan un hondureño al país.

Todos llegan al aeropuerto sampedrano Ramón Villeda Morales, pues desde 2012 ya no se envían vuelos a Tegucigalpa. Los aviones con deportados llegan de lunes a viernes, dos veces por día y los viajeros son enviados al Centro de Atención al Migrante Retornado (CAMR), el cual está muy cerca de la terminal aérea.

Historias

Luz Ramírez es de Tegucigalpa, pero tenía ocho años de vivir en Estados Unidos, adonde tiene dos hijos y su marido, pero por un problema familiar decidió venir a Honduras.

Al intentar regresar como ilegal no tuvo éxito. “Tardé dos meses en llegar, pero solo crucé la frontera y me agarró Migración. Mi esposo pagó 4,500 dólares. Fracasé, pero no me rendiré.

Volveré a intentarlo, no cuentan las veces que te caes sino las que te levantas. Mi familia me espera en Virginia”, relató Ramírez, quien advirtió sobre los peligros del viaje.

“Esta vez que me fui me tocó subir en el tren en México, que le dicen la bestia, pero ahora que me vuelva a ir eso no lo haré otra vez, porque es muy peligroso.

En el viaje hay que tener mucho cuidado, especialmente las mujeres, porque allá hay mucha delincuencia, no solo les quitan las cosas, sino que hay drogas, prostitución, están las maras y secuestran y violan a las mujeres, hay muchas cosas muy feas. Gracias a Dios yo no tuve que vivir nada de eso, me fui con alguien de confianza”, dijo la valiente mujer.

José Nelson Quintanilla Castellanos es otro de los migrantes hondureños que regresó ayer al país; él es de Santa Rosa de Copán y solo pudo dar en libertad unos pasos en territorio estadounidense.

“Yo salí el 12 de abril de Honduras y me agarraron el 26 de mayo en Texas, apenas había llegado. Iba caminando y una patrulla me encontró, junto a un primo y un amigo que hicimos el viaje.

Es triste porque cuando a uno lo agarran ya no queda oportunidad. Pagué mil dólares, pero qué se le va a hacer”, expresó Quintanilla.

Geraldina Garay, directora del CAMR, reveló que antes había ocasiones que los aviones con indocumentados no venían llenos, pero que ahora casi todos los vuelos vienen repletos.

“Este podría ser el año con más deportaciones en la historia de Honduras, porque ya son casi 17,000 deportaciones en lo que va del año 2013 y aún faltan seis meses para llegar al 2014”, declaró Garay.

En el CAMR a los hondureños deportados se les toman los datos, se les da transporte y dinero para que coman y un kit con utensilios de aseo personal.