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12:06 AM

Asesinan a operario de maquila y a ayudante de rapiditos en la López

  • 25 marzo 2019 /

A una de las víctimas lo llamó una exnovia a medianoche para verse, él salió y le dispararon en la colonia Valle de Sula.

San Pedro Sula, Honduras.

José Danilo Castañeda (de 18 años), quien trabajaba como ayudante de buses rapiditos, y Franklin de Jesús Padilla (de 24) fueron asesinados en lugares diferentes del sector López Arellano.

Las autoridades reconocieron el cadáver de José Danilo Castañeda en la colonia Valle de Sula, adonde sujetos le dispararon en varias ocasiones.

Familiares que estaban en la escena indicaron que el joven salió la noche del sábado y regresó a su casa a dormir.

En una esquina de la Valle de Sula mataron a José Castañeda.
Cerca de las 2:00 am recibió una llamada de una exnovia que le dijo que llegara a un lugar del cual él no especificó.

Al estar en una esquina de la calle principal de la colonia Valle de Sula, del mismo sector, desconocidos le dispararon en varias ocasiones, quedando muerto en el lugar.

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En la escena, los técnicos de Inspecciones Oculares de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) recogieron varios casquillos alrededor del cuerpo de la víctima.

Vecinos solo indicaron a la Policía que en la madrugada escucharon los disparos, pero no salieron por temor.

Otro hecho. En la colonia Armando Gale fue asesinado Franklin de Jesús Padilla, quien trabajaba como operario en una maquila. Parientes indicaron que el muchacho salió la noche del sábado a un negocio cercano de su casa y sujetos le dispararon en varias ocasiones.

Los parientes llegaron ayer a la morgue de Medicina Forense a reclamar el cuerpo, el cual fue entregado a las 12:30 pm.

Manifestaron que llevarían el cadáver a Olancho, de donde era originario, para a velarlo y enterrarlo.

Franklin de Jesús residía desde hace varios años en el sector de la López Arellano y trabajaba como operario de maquila.

La familia desconoce por qué le quitaron la vida, pues creen que no tenía problemas con nadie.

Miembros de una iglesia evangélica a la que asistía acompañaron y ayudaron a la familia de Franklin de Jesús para que lo pudieran llevar hasta su pueblo.

La Policía, en sus informes de los dos asesinatos, no dio a conocer móviles ni tenían sospechosos detenidos.