San Pedro Sula, Honduras
Luego de una investigación sobre el siniestro en el que murieron dos menores de edad y que ocurrió el pasado 6 de marzo en la colonia Prado Alto en San Pedro Sula, el Cuerpo de Bomberos descartó que el incendio haya sido provocado.
Después de casi dos semanas del lamentable incidente que conmocionó a la población hondureña, el Benemérito Cuerpo de Bomberos dictaminó que no hubo mano criminal.
Las dos pequeñas víctimas Jasir Espinal (2) Estarlin Espinal (4) se encontraban en el cuarto principal de la casa al momento del incendio y quedaron totalmente calcinados. Según un tío de los niños, estos estaban bajo el cuidado de la abuela que fue identificada como doña Bertha Ramos Varela (85), quien resultó con quemaduras en sus brazos y cabeza y fue trasladada de emergencia al hospital Mario Catarino Rivas.
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Vecinos reportaron el incendio pero fue imposible salvar a los menores.
El joven Pablo Enrique Guzmán, vecino de las pequeñas víctimas fue detenido por creerlo sospechoso, pero fue puesto en libertad tras encontrarlo sin responsabilidades por el siniestro.
Sin embargo, serán las autoridades policiales de la DPI y las autoridades judiciales quienes al final deduzcan responsabilidad alguna en caso de que las investigaciones forenses posteriores indiquen algún otro dato, indicó Jorge Bonilla, portavoz del Cuerpo de Bomberos.
