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Matan a tres conductores de mototaxis en Choloma

  • 26 marzo 2017 /

Dos de ellos salieron de sus casas a departir con amigos después de trabajar.

San PedroS Sula, Honduras

El conductor de mototaxis Ángel Díaz, del sector López Arellano, logró mandar un mensaje de voz a través de WhatsApp poco antes de que junto con su amigo Carlos Norlan Aguilar Sánchez (de 20 años) fueran ultimados la madrugada del domingo.

Ambos eran conductores de mototaxis de la colonia Las Cascadas 2 y sus cadáveres fueron encontrados ayer en horas de la mañana en una hondonada de la misma colonia.

En horas de la noche de ayer, las autoridades policiales reportaron la muerte de otro conductor en la colonia Champerío, del mismo sector. La víctima fue identificada solo como Jonathan, conocido como, el “Negro”.

El sábado 25 de marzo en horas de la noche, Ángel Díaz y Carlos Norlan Aguilar salieron a departir con amigos, y a eso de las 1:00 am, cerca de la pulpería Papito, de la López Arellano, fueron interceptados por desconocidos.

En ese momento, a Ángel se le ocurrió enviar un mensaje de voz desde su celular, en el cual se escucha que estaban siendo detenidos y los muchachos les decían que vivían en las cercanías de la zona.

Cuando miembros de la familia se dieron cuenta del mensaje, fueron a la posta policial de la López Arellano y la jefatura de Choloma, pero les indicaron que no estaban detenidos.

Aproximadamente a las 7:00 am, a otros compañeros de los muchachos les avisaron que en el basurero de la colonia Las Cascadas 2 estaban los cuerpos de dos hombres.

Los amigos reconocieron los cadáveres de los dos conductores de mototaxis, al igual que los familiares que llegaron llorando a presenciar la escena.

Carlos Norlan Aguilar, según sus familiares, tenía unos tres años de trabajar en el transporte de la colonia Las Cascadas y vivía con su abuela en esa zona.

Compañeros de las dos primeras víctimas se quejaron por la falta de seguridad y denunciaron que los policías solo llegan a tratar de hacerles esquelas, por lo que se ven obligados a pagarles desde 50 a 100 lempiras. “No podemos trabajar, no nos dejan y si ven que los muchachos andan conduciendo hay más problemas”, manifestaron los ciudadanos.

Los cuerpos de Carlos Norlan y Ángel Díaz estuvieron tirados en la hondonada durante toda la mañana, pues el fiscal y el personal técnico llegaron hasta las 12:00 del mediodía a la escena.