San Pedro Sula. La burocracia, la percepción de corrupción y la inseguridad continúan minando el desarrollo de Honduras como polo de atracción de inversión, según el Foro Económico Mundial (WEF, en inglés).
Así se deja entrever en el Índice Global de Competitividad que se publica anualmente y que este año ubica a Honduras en el puesto 111 entre 148 países (el año pasado fue 90).
Al evaluar 12 variables como instituciones, infraestructura, macroeconomía, salud y educación, eficiencia del mercado, eficiencia de la fuerza laboral y situación bancaria, el país obtuvo un puntaje de 3.7 sobre 7.
El WEF destaca como desventajas del país el mal uso del gasto público, la inseguridad y falta de credibilidad en la Policía, baja calidad de la educación, falta de incentivos para la inversión y el deficiente uso del talento, entre otros aspectos.
Por el contrario, destaca como puntos favorables la apertura comercial, disponibilidad de servicios financieros y acceso al crédito y la transferencia tecnológica. En Centroamérica, el ranking lo lidera Panamá (40), seguido de Costa Rica (54), Guatemala (86), El Salvador (97), Nicaragua (99) y Honduras.
En reacción a la noticia, la presidenta de los empresarios, Aline Flores, dijo que en los últimos años “Honduras efectuó poco por mejorar la competitividad”.
